«Si hay confusión es porque Castellón de la Plana no utiliza el topónimo correcto»

El Ayuntamiento de Castelló presenta un doble recurso de casación ante el Supremo y el TSJ contra la sentencia que anuló la forma exclusiva en valenciano

Una antigua señal con la denominación en castellano tachada, en una imagen de archivo.

Una antigua señal con la denominación en castellano tachada, en una imagen de archivo. / Perales Iborra

Alzira

La alcaldesa de Castelló, Horte Gómez (PSOE), no se muestra sorprendida por la negativa de la Generalitat a recurrir la sentencia que anula el topónimo Castelló como forma exclusiva en valenciano -«era de esperar por un tema de colores políticos», comenta- y tampoco duda en señalar que, si como dice el fallo, esta denominación genera alguna confusión, no es por culpa de su ayuntamiento. 

«Nosotros gastamos el nombre que está aprobado, si hay confusión es porque otros no gastan el topónimo correcto», comenta en una alusión clara al Ayuntamiento de Castellón de la Plana cuando utiliza la forma abreviada Castelló o Castellón. «Pero esas confusiones se pueden solucionar muy rápidamente», comenta, mientras recuerda que hay códigos postales diferentes para cada municipio y otras forma de identificación de entidades locales.

La alcaldesa de Castelló, Horte Gómez, en una imagen de archivo.

La alcaldesa de Castelló, Horte Gómez, en una imagen de archivo. / Perales Iborra

Doble recurso de casación

El Ayuntamiento de Castelló sí ha presentado un doble recurso de casación contra la sentencia que anula el topónimo que se utiliza como oficial desde octubre de 2020 -lo que implica reinstaurar la forma en castellano Villanueva de Castellón-, uno en el ámbito estatal (Tribunal Supremo) y otro en el autonómico (TSJCV). Los servicos jurídicos del ayuntamiento aportan cuatro sentencias que, en situaciones similares, realizan una interpretación diferente, entre las que figuran las resoluciones que sirvieron para dar carpetazo el pleito del topónimo Castelló de la Ribera tras el allanamiento de la Generalitat, que vienen a incidir en que es la Administración la que tiene la potestad para decidir el nombre de un pueblo.

Los recursos interpuestos por el ayuntamiento plantean como debate de fondo que un «concepto jurídico indeterminado», como es la confusión que pueda generar entre Administraciones, no puede tener más peso que la potestad de la Administración para tomar una decisión en el ámbito de sus competencias, cuando la ley no concreta cómo ni cuándo se produce esa confusión.

La sentencia que anuló el topónimo de Castelló reconoce que el proceso para valencianizar el nombre de la antigua Villanueva de Castellón siguió todos los pasos y recabó todos los informes preceptivos, por lo que desde el punto de vista formal resulta impoluto, pero determina la nulidad del decreto del Consell de la Generalitat en base al argumento de los demandantes de que genera confusión entre administraciones.

El recurso del Ayuntamiento de Castelló contra la anulación del topónimo expone por un lado que hay sentencias contradictorias con esta resolución en casos similares, dos del TS y otras dos del TSJCV, al tiempo que argumenta al objeto de que sea admitido a trámite que la interpretación que realiza el TSJ puede ser lesiva para los intereses generales, ya que no sólo hay otros municipios que comparten en su denominación el nombre Castellón, sino que hay también otras formas homónimas con nombres como l’Alcúdia, Villanueva o Cervera.

También expone que en los últimos 25 años se han producido 261 modificaciones de topónimo por lo que el debate no sólo afecta a Castelló y tiene interés casacional.

Tracking Pixel Contents