La excavación de un tramo original de la muralla servirá de ejemplo para definir la restauración

La intervención sobre la muralla almohade de Alzira consensuada por los técnicos de la Conselleria de Cultura y del ayuntamiento para revertir tanto la capa de mortero que ha cambiado la estética exterior de la fortaleza como el garbancillo y el cemento que se aplicó en los años setenta, una capa inferior que evita la transpiración y está provocando daños en la piedra original, se concibe como un proyecto a largo plazo que presumiblemente se acometerá por fases, según han confirmado los concejales de Urbanismo y Patrimonio, Andrés Gomis y Xavier Pérez. La propuesta de realizar una excavación para sacar a la luz un mayor tramo de la muralla permitirá tener más información de cómo afecta la humedad y, al mismo tiempo, descubrir una franja sobre la que no se ha actuado nunca para que pueda servir de modelo en la restauración del resto del lienzo.

Alzira revertirá la restauración de la muralla almohade que cuestionó Cultura

Con todo, Gomis ha dejado claro que, a corto plazo, el proceso se centrará en ampliar el estudio de la muralla con una franja mucho más grande para completar la información que han aportado las seis catas realizadas y que será en ese momento cuando se defina a qué punto se quiere llegar, cómo se enfoca y el coste de la intervención. «Se trata de hacer una especie de plan director y, en última instancia, llegar a quitar las diferentes capas y proceder de la forma que nos digan los técnicos.Pero en estos momentos no sabemos ni la cantidad, ni el impacto ni el alcance de lo que se quiere hacer», explica el concejal de Urbanismo.

Gomis asume que la retirada de la capa aplicada en la última intervención, que provocó que la Conselleria de Cultura paralizara las obras, se presume como la menos costosa económicamente y más fácil de realizar.

Reanudar el paso de ronda

El edil ha señalado que el ayuntamiento ya ha solicitado autorización a la conselleria para realizar un estudio en un tramo de cuatro metros de anchura, de arriba a abajo de la muralla, para conocer los diferentes niveles de afección, ya que se presume que la humedad es mayor en la parte inferior. Paralelamente, y a la espera de las actuaciones que se puedan realizar en la muralla, el ayuntamiento también ha pedido permiso a la conselleria para poder reanudar la intervención en el paso de ronda para completar este sector de la intervención. Una vez se realicen estas obras se podrá conocer el dinero de la subvención que queda disponible para revertir las obras realizadas. El ayuntamiento prevé que la retirada de otros elementos impropios será larga y deberá ir vinculada a la posibilidad de conseguir subvenciones.

Como ayer adelantó Levante-EMV, la información aportada por las catas ha permitido concluir que es viable retirar la capa de mortero aplicada en la última intervención, que ha cambiado la estética exterior, pero que también es aconsejable eliminar la intervención de los años setenta que está provocando un efecto de impermeabilización y una concentración salina que provoca que se esté degrandado la piedra original de la muralla.

Suscríbete para seguir leyendo