Salvem el Parc rechaza el último plan para reformar el parque de Sant Pere
El proyecto contempla abrir dos nuevas puertas y caminos y hormigonar los viales que confluyen en el centro - El diseño aún no ha sido mostrado ni a los vecinos ni a los concejales del ayuntamiento

Salvem el Parc rechaza el último plan para reformar el parque de Sant Pere
s. s. | gandia
El departamento de Urbanismo de Gandia ya tiene cerrado el diseño de la polémica reforma del parque de Sant Pere que el alcalde de la ciudad, Arturo Torró, anunció hace cerca de un año y que se ha encontrado con el rechazo de la plataforma Salvem el Parc.
Según pudo verificar ayer este periódico, ese proyecto de reforma se queda muy lejos de lo que se anunció inicialmente. La decisión del Gobierno local es hormigonar los dos anchos caminos que confluyen en el centro y recubrirlos con baldosas, también de hormigón. Se abrirá una nueva puerta a poniente, en la calle Ciutat de Laval, a la que se llegará por un nuevo un camino más estrecho, y otra senda, con puerta incluida junto a los aseos, que enfrentaría con la calle Damià Forment, situada al norte de esta gran zona verde.
No se ponen nuevos juegos infantiles ni se remueve terreno. Se trasplantan cuatro árboles del acceso que da a Gregori Maians para poder situar plátanos que den sombra en verano, pero no se corta ningún ejemplar vegetal.
La obra afecta a una superficie de dos mil metros cuadrados, y los técnicos reconocen que el mayor movimiento de tierras se producirá en los dos anchos caminos porque se tiene que levantar el firme, que ahora es de arena compactada, para formar las bases de hormigón sobre las que se asentarán las baldosas.
Esta reforma, que costará 148.000 euros, se queda a años luz de la que se anunció inicialmente. Primero se dijo que costaría cerca de 700.000 euros y después se rebajó el presupuesto a unos 550.000. La falta de dinero ha sido clave a la hora de encargar un parque mucho más austero.
Tampoco se apunta consenso
A pesar de eso, todo apunta a que tampoco así habrá consenso. Por una parte, la asociación Salvem el Parc ya rechazó ayer el proyecto. Su presidente, Joan Siscar, indicó a este periódico que la reforma es «contraria a la que quieren los vecinos», y lamentó que nadie en el Gobierno de Gandia les haya mostrado el proyecto a pesar de que el alcalde dijo anteayer en una entrevista que las obras empezarán «en unos quince días».
Tampoco han visto el proyecto los concejales de la oposición en el Ayuntamiento de Gandia. Liduvina Gil, por el PSPV-PSOE, y Lorena Milvaques, de Compromís, que son miembros de la Junta de Distrito de Roís de Corella, expresaron ayer sus críticas por no haber sido informadas del proyecto de obras cuyo inicio se augura inminente.
Ante esos reproches, el Gobierno local del PP respondió inmediatamente y aseguró que la próxima semana se convocarán las reuniones pertinentes para dar a conocer a todos los concejales y a los vecinos el diseño de esta polémica obra.
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