Gandia licita la gestión de la grúa y la Zona Azul por 1,6 millones en 6 años

El Gobierno local del PP saca de la empresa pública un negocio ruinoso para entregarlo a una concesionaria La privatización podría acarrear despidos en una plantilla de unos 15 trabajadores

s. s. gandia

El Ayuntamiento de Gandia ha iniciado el proceso para vaciar de contenido a la empresa Iniciatives Públiques Gandia (IPG), que se encuentra en una situación de ruina y déficit estructural. Y lo ha hecho con la gestión de la Zona Azul y de la grúa municipal que retira los vehículos que aparcan en lugares prohibidos.

Después de traspasar esa competencia de IPG al ayuntamiento, el Gobierno local del PP acaba de sacar a licitación el contrato para la gestión de ambos servicios, que costarán al consistorio la friolera de 1,6 millones de euros en seis años, cuatro de concesión y otros dos en caso de prórroga, según consta en el pliego de condiciones.

El ayuntamiento, a través de IPG, ha tenido que asumir en los últimos años un enorme déficit de la gestión de la Zona Azul y de la grúa municipal. Algunos ejercicios esos números rojos rondan el medio millón de euros, una pesada carga que se hace insostenible para un municipio endeudado hasta las cejas.

Según figura en las bases de la licitación de estos dos servicios, el ayuntamiento pagaría a la empresa que se los adjudique 345.000 euros el primer año, y alrededor de 267.000 desde el segundo al sexto. Eso es mucho menos que el déficit anual que la Zona Azul y la grúa acarrea ahora a IPG, de manera que la mercantil privada que quiera asumir estos servicios deberá recortar en gastos.

Eso induce a pensar que, además de mejorar la gestión de IPG, la nueva concesionaria deberá adoptar medidas que afectan a la plantilla de trabajadores, constituida en estos momentos por unas quince personas. Estos operarios se ocupan de vigilar la Zona Azul para detectar a los infractores que no pagan por estacionar en esas calles y del mantenimiento de los parquímetros expendedores de tíquets. En la grúa están los conductores que retiran de la vía pública los vehículos mal estacionados y los trasladan hasta el depósito municipal, situado en la carretera de Almoines, así como quienes atienden a las personas que acuden a recogerlos y cobran el correspondiente servicio.

Hace unos meses el Ayuntamiento gandiense desestimó un proyecto que habría supuesto la ampliación de la Zona Azul, añadiendo más calles de estacionamiento temporal y de pago. Aquella actuación, que incluía la gestión de la grúa municipal y de todos los párkings de la ciudad, tanto los subterráneos como los situados en campas al descubierto, no pudo llevarse a cabo debido, precisamente, al descomunal endeudamiento público de la institución municipal.

Solo quince días para las ofertas

A pesar de ser un servicio de una considerable cuantía económica, el Gobierno local del PP ha dado solo 15 días para que las empresas interesadas presenten su documentación. Inicialmente se habían fijado 30 días, pero ayer ese periodo se redujo a la mitad.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents