La Conselleria de Educación ha rechazado las alegaciones que los colegios La Murtera, de Palma de Gandia y Ador, y Valldigna, de Simat, habían presentado contra la supresión de unidades escolares de cara al curso 2015-2016.
Así lo refleja el arreglo escolar definitivo publicado el pasado martes en el DOCV y en el que se refleja si se ha producido algún cambio en el provisional del pasado mes de enero.
De ese modo, la situación en la comarca de la Safor no varía mucho respecto a aquel primer documento. En total, en la comarca se perderán seis unidades, tres del ciclo de infantil y dos de primaria. La mayoría de ellas son heredadas, es decir, que vienen dadas porque en un curso inferior se había suprimido una unidad anteriormente.
Además de Simat y Ador, también pierden una unidad el colegio Roís de Corella de Gandia, que no alegó al ser un supresión heredada, el Alfàndech y el Magraner, de Tavernes de la Valldigna, y el colegio Oliveretes, de Miramar, que se queda sin una unidad de primaria.
Por otra parte, para los centros de la comarca la Generalitat ha creado cinco nuevas aulas, con lo que el saldo sigue dando un resultado negativo. Los centros que tendrán más unidades el curso que viene son El Castell de Almoines (1), Sante Pere Apòstol de l'Alqueria (1), Hort de Palau de Oliva (2) y el Mondúver-Safor de Potries (1).
El representante del sindicato STE-PV, Àlex Vercher, aseguraba que esas supresiones supondrán que «entre cinco y ocho maestros tengan que dejar los centros». Además, criticó que «si la Generalitat ha suavizado este año las supresiones es porque son elecciones, claramente» y dijo que «Educación se ha ensañado especialmente con esta comarca en los últimos años eliminando decenas de unidades y maestros».
