Una inspección llevada a cabo por el Ayuntamiento de Gandia ha revelado que el 39 % de las fruterías y verdulerías de la ciudad tienen trabajando en sus locales a empleados que no están dados de alta en la Seguridad Social.
La revisión la llevaron a cabo los agentes de la Policía Local y se inició a raíz de una petición de empresarios del sector, que se dirigieron expresamente al ayuntamiento a solicitarlo ante las sospechas de que se estaban produciendo irregularidades en algunos establecimientos.
En total, los agentes visitaron 44 negocios, un 70 % de los existentes en la ciudad, y detectaron que la gran mayoría, un 61 % sí que ofrecen su servicio con toda la documentación en regla de sus trabajadores. Sin embargo, en 18 de los negocios la totalidad o alguno de los empleados no disponían del correspondiente contrato ni alta en la Seguridad Social.
El concejal de Comercio, Bernardo Mendieta, ofreció ayer los datos y explicó que aún faltan unos 30 negocios por visitar, pese a lo cual ya se puede ofrecer un primer balance. El edil quiso dejar claro que «esta inspección no pretende ir contra comerciantes extranjeros, ni contra nadie en concreto, si no que se han visitado todos los negocios, no se pretende criminalizar a nadie, solo que todos estén en igualdad de condiciones».
El Ayuntamiento de Gandia no tiene competencias para sancionar estas irregularidades. Sin embargo, el informe que ha sido elaborado por los agentes va a ser remitido a la Inspección de Trabajo para que proceda como considere oportuno tras estudiar los casos, explicó Mendieta.
El responsable del departamento de Comercio señaló, además, que aparte de irregularidades en lo que a la situación contractual de los trabajadores se refiere, gracias a este estudio se han detectado «dos o tres» fruterías que no disponen de la licencia de actividad, la cual sí que corresponde directamente al ayuntamiento otorgar. «A estos se les ha dado un plazo de entre 10 y 15 días para que regularicen su situación o, de lo contrario, se procederá a la clausura del negocio», explicó.
El edil explicó que la solicitud para que se llevara a cabo la inspección la presentaron «comerciantes de los de toda la vida», quienes, según dijo, se mostraron preocupados ante las sospechas de que había empresarios del sector que no estaban cumpliendo con los requisitos legalmente establecidos.
«Desde al ayuntamiento pretendemos que todos trabajen con las mismas armas y tengan las mismas posibilidades de salir adelante pero con el cumplimiento de la ley», señalo Mendieta.
La ausencia de licencias de actividad, la presencia de trabajadores sin contrato u otro tipo de irregularidades suponen una competencia desleal en el sector, ya que ello provoca que los negocios que no cumplen, y por tanto no pagan tantos impuestos, pueden ofrecer mejores precios que los que soportan más cargas.
