El proyecto para abrir un campus de la Universidad Católica de Valencia en Gandia depende, en gran medida, del ayuntamiento. Eso es así porque el acuerdo entre ambos obliga al consistorio a poner tres millones de euros en la obra.
Independientemente de que esa cantidad resulte insuficiente para adecuar o construir el nuevo edificio, el alcalde de la ciudad, Arturo Torró, anunció unas muy favorables condiciones para la Universidad Católica, que «devolvería» esos tres millones a un ritmo de 5.000 euros al mes. Tendrían que pasar 50 años para que el consistorio, endeudado hasta las cejas, recuperara la inversión realizada. t. á. c. gandia