El tiempo pasa rápido. El 8 de marzo celebramos el día de la mujer trabajadora, en abril la «Cursa de la Dona», estamos en mayo y celebramos otro acontecimiento, el Día de la Madre. Recordamos la entrega, el esfuerzo, el cariño, la superación de las mujeres y las madres. Será porque seguimos necesitando atención, reconocimiento y ayuda?
Estos días desde el ayuntamiento hemos presentado un detector de humos para instalar en las viviendas de las personas que viven solas en nuestra querida Gandia. De las personas que viven solas, más de tres mil, el 85 por ciento son mujeres.
Se ha armado revuelo. ¡Es electoralista! ¡No se puede presentar! Ni por casualidad a los otros partidos políticos nunca se les ha ocurrido pensar en nuestras personas solas. Pero ahora resulta que estamos en periodo electoral. ¿Saben que les digo? Mi madre tiene 83 años, su amiga Lola 84, su amiga María 81. Y queremos el detector de humo conectado con la estación de bomberos.
Cualquier medida que sirva para mejorar su seguridad, las familias lo necesitamos. Ellas y ellos quieren seguir viviendo solas, independientes y en sus casas. Nosotros les tenemos que ayudar a conseguirlo con más empeño, imaginación y cariño.
Si Dios quiere, y los ciudadanos también, después del 25 de mayo presentaremos otras medidas para seguir ayudando a los mayores, trabajar con el corazón para un futuro mejor para todos.
No es electoralista poner un detector de humo en la vivienda de una persona mayor sola, casi todo mujeres. Es electoralista decir «no te dejo hacerlo porque es demasiado bueno y esa medida puede perjudicar a la oposición, que nunca lo pensó». Os dejo pensando, pero con el «mazo» dando.
