Prometió diez millones de euros de la Generalitat para el viejo hospital. No sé si es infantil preguntar si reclamará ese dinero y si cree que llegará.
Sí y sí. Confío en mis compañeros. No hicimos promesas que no podamos cumplir. Se dan gobiernos progresistas, con Ximo Puig como presidente de la Generalitat y conmigo en Gandia, que harán posibles los proyectos que defendimos y que eran viables.
¿Hay trece votos en este ayuntamiento para que Gandia vuelva a la Mancomunitat?
Sí. Es una cuestión que nos reclaman empresarios, y todo el mundo. Ha sido un error poner fronteras con el resto de la comarca de la Safor.
¿Habrá conciertos de verano?
No hemos adoptado decisiones, pero eso me quita el sueño. Los primeros quebraderos de cabeza son personas que me han parado por la calle pidiendo que el ayuntamiento pague a las empresas o a ciudadanos que tienen ayudas municipales. Esas personas que no tienen qué llevarse a la boca son la prioridad.
Se acabó el parque acuático y el campo de golf del marjal.
Seguramente. Estudiaremos los expedientes que no conocíamos pero que creemos que no tenían consistencia.
¿Toros?
Tampoco
Sigue sin trato con el exalcalde de Gandia.
Sí. Nunca hemos tenido una relación fluida.
De vacaciones, ni hablar.
Ni hablar. Me siento una persona muy afortunada. Teníamos ganas de gobernar para mirar la situación de frente y ahora que estamos aquí no tengo ganas de perderla de vista.