Hace años no ocurría, pero la evolución de la sociedad ha hecho que, en un mismo espacio público, ahora coincidan un acto religioso, como es una procesión, con el dinamismo y el jolgorio de la terraza de un local de copas, un bar o un restaurante.
Esa imagen, que ofrece un claro contraste entre quienes participan en la procesión y los que están comiendo o bebiendo en la calle, se repitió la pasada Semana Santa de Gandia en la plaza del Prado y la calle Rausell, donde en los últimos años han proliferado locales de copas, tapas y restaurantes. Por ese lugar pasó, la tarde y noche 3 de abril de este año, la procesión de Santo Entierro, la más importante y solemne de la ciudad. Las imágenes, los cofrades y los penitentes que participan en ella se mezclaron con los clientes de los locales y de decenas de personas que cruzan constantemente la procesión para ir de una parte a otra de la calle.
Esas escenas ya no se repetirán el año próximo. La Junta Mayor de Hermandades de la Semana Santa de Gandia se adapta a los tiempos, reconoce el derecho de los locales a permanecer abiertos a esa hora y, para buscar más tranquilidad, cambiará el itinerario del Entierro del Viernes Santo.
La decisión se ha adoptado después de que varias hermandades expresaran su queja por considerar que, especialmente en la calle Rausell y la plaza del Prado, se rompía el ambiente de recogimiento y silencio que se estima conveniente para una procesión como esta.
La presidenta de la Junta Mayor de Hermandades, María José Martí, señaló ayer que el desencadenante de este acuerdo está en la procesión del Santo Entierro de este año, cuando muchos cofrades confesaron su malestar por esa mezcla de ambientes que no favorece ni a la imagen de la procesión ni al recogimiento de quienes participan en ella.
«No queremos que nadie piense que vamos en contra de los negocios que allí han abierto en los últimos años», insiste Martí, de manera que al final se ha decidido, por amplia mayoría, desviar la procesión del Viernes Santo por otro itinerario.
En la próxima Semana Santa ese solemne desfile, en el que participan todos los cofrades y las imágenes religiosas, partirá del cruce de las calles Alzira con Sant Francesc de Borja pero, al llegar al paseo de les Germanies, evitará Rausell y el Prado para dirigirse hacia Vallier. A la altura de la plaza de Sant Josep se virará por Mesquita del Raval hacia la calle de Baix y, desde allí, nuevamente hacia el paseo, la calle Duc Alfons el Vell y la plaza Major, punto de finalización.
Martí señala que esa ruta ya ha sido consultada con el Ayuntamiento de Gandia y que la Policía Local no ha puesto ningún inconveniente.
