Dos conductores resultaron ayer heridos, uno de ellos grave, al chocar frontalmente con sus vehículos cuando circulaban por la N-332 a su paso por el municipio de Bellerguard. Es el tercer accidente que se produce en esta misma vía en una semana con un balance de un fallecido, un anciano de 73 años que fue atropellado por un camión al tratar de cruzar de una a otra acera. Estos siniestros vienen a demostrar la peligrosidad de esta vía por la cantidad de tráfico que soporta.
El peor parado en este último siniestro fue el conductor de 60 años que viajaba en un turismo. Tras ser atendido en el mismo lugar del accidente, fue trasladado al hospital Francesc de Borja de Gandia, donde quedó ingresado para ser sometido a más pruebas.
Según testigos de los hechos, este hombre recibió un fuerte golpe en el pecho, al parecer, contra el volante y debido al impacto con el otro vehículo, una furgoneta conducida por otro varón de 39 años, que, en este caso, fue dado de alta en el mismo lugar.
Se desconocen las causas exactas por las que se produjo el choque y si los dos vehículos circulaban en dirección contraria o si uno de ellos salió de una de las calles que dan acceso a la N-332 sin percatarse de que el otro venía de cara, lo que ocasionó la colisión.
Hasta el lugar de los hechos se desplazó una unidad de bomberos para excarcelar a uno de los heridos y limpiar la calzada, pues, según los testigos, uno de los dos vertió vertió aceite del motor sobre la carretera, lo que podía poner en peligro la integridad del resto de conductores.
Este accidente se produce días después de que Bellreguard, l'Alqueria de la Comtessa, Palmera y Oliva, encabezados por sus alcaldes, celebraran una protesta apoyada por 300 personas en la que pedían la liberación de la AP-7, algo que supondría la salida del tráfico pesado de sus cascos urbanos y, en parte, cumplir con una histórica reivindicación de estas localidades, la de acabar con el ruido, la contaminación y el peligro que sufren sus vecinos al verse sometidos cada día al paso de miles de vehículos, muchos de ellos camiones, por el interior de sus municipios. Los alcaldes tienen previsto llevar a cabo nuevas movilizaciones a lo largo de este año para elevar sus exigencias al Estado y cuentan con el apoyo de sus vecinos.
