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Los12 alcaldes de la Vía Verde del Serpis se conjuran para desbloquear el proyecto

El ingeniero explica en la reunión de Villalonga que los ayuntamientos no tendrán que poner dinero

Los12 alcaldes de la Vía Verde del Serpis se conjuran para desbloquear el proyecto

El Ayuntamiento de Villalonga acogió en la mañana de ayer el enésimo intento de desbloquear los trámites para habilitar la llamada Via Verde del Serpis, un proyecto reclamado desde hace décadas consistente en aprovechar la antigua plataforma del tren Gandia-Alcoi para el uso recreativo, ciclista y turístico.

Los alcaldes o miembros de los gobiernos locales de Alcoi, Cocentaina, Muro, Gaianes, Beniarrés, l'Orxa, Villalonga, Potries, Beniflà, Beniarjó, Almoines y Gandia se conjuraron para reactivar el consorcio de municipios creado hace cerca de diez años que, junto a las diputaciones de Alicante y Valencia, la Generalitat y el Ministerio de Medio Ambiente, pueden ejecutar este proyecto.

La reunión fue convocada por la alcaldesa de Gandia, Diana Morant, y todos los representantes políticos acogieron con entusiasmo la reactivación de este proyecto y solicitaron que no ocurra como en tantas ocasiones anteriores, cuando, tras las reuniones, no hubo seguimiento.

Entre los más entusiastas, el concejal de Cocentaina, Saül Botella, quien señaló que este es un «proyecto de la ilusión» y animó a los alcaldes a no cejar en el empeño para ejecutarlo porque «no sabemos la riqueza que tenemos aquí».

También la alcaldesa de Gandia, Diana Morant, señaló que se trata de una actuación importantísima para el desarrollo cultural y turístico de las comarcas de la Safor, el Comtat y l'Alcoià y que «tenemos la obligación de hacer realidad este sueño».

En esencia, el proyecto está redactado. El ingeniero Alfonso Jordà llevó a cabo hace diez años un estudio detallado que contempla el itinerario, las posibles alternativas allí donde se ha perdido o la reposición de los puentes sobre el río Serpis, que fueron desmantelados cuando, en 1969, cerró la vía férrea Gandia-Alcoi.

Se trata de una actuación valorada en 9 millones de euros que permitiría adecuar la vía verde en todo su itinerario y prolongarlo hasta el municipio de Agres, donde enlazaría con otra vía verde que se adentra hacia Villena y la localidad murciana de Yecla.

La mayoría de los alcaldes, nuevos tras las últimas elecciones, reconocieron desconocer tanto el proyecto como las gestiones realizadas en años anteriores para hacerlo posible, de manera que todos ellos se han emplazado a una nueva reunión el sábado, 30 de enero, en Beniarrés para hablar del tema una vez hayan consultado en sus respectivos ayuntamientos la tramitación realizada hasta el momento.

El ingeniero Alfonso Jordà, también presente, explicó a los alcaldes que, en principio, ningún ayuntamiento tendría que poner dinero porque el plan previsto contemplaba que la financiación corriera a cargo de la Generalitat, el Ministerio de Medio Ambiente y las diputaciones de Alicante y Valencia. De hecho, los alcaldes de Gandia y Alcoi se comprometieron a consultar en estos quince días con las respectivas diputaciones para que un representante de ellas acuda a la reunión de Beniarrés.

Lo que sí que correría a cargo de los municipios es el futuro mantenimiento de la vía verde, algo a lo que todos los dirigentes se comprometieron ayer.

La mayoría de los alcaldes presentes en el encuentro de Villalonga señalaron que ahora lo importante es que cuanto antes se desbloqueen todas las gestiones y, en este sentido, el Ayuntamiento de Gandia tiene prevista una reunión con representantes del Ministerio de Medio Ambiente la próxima semana durante la Feria Internacional de Turismo (Fitur), que se celebra en Madrid.

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