La Generalitat Valenciana, a través de la Entidad de Infraestructuras de la Generalitat (EIGE), pondrá en alquiler, dentro del Plan de Dignificación de la Vivienda que el ejecutivo valenciano quiere poner en marcha, alrededor de 120 pisos de su propiedad ubicados en dos edificios concretos de Gandia.
Se trata de las 80 viviendas que se encuentran en un edificio de la calle Benicanena, en la urbanización Beniopa-Passeig, y de otro edificio del Grau, donde se estima que hay alrededor de 40 viviendas, todas ellas propiedad del EIGE (antiguo Institut Valencià de la Vivenda).
Los destinatarios serían familias con dificultades para llegar a fin de mes o jóvenes que no tienen capacidad de acceso a una casa y que en ningún caso pagarían más de un 30 % de los ingresos totales que perciben. La Generalitat, por tanto, cambiaría la modalidad de cobro. No fijaría un precio de mercado sino que estaría basado en lo que cada núcleo familiar ingrese mensualmente.
Así lo explicó ayer a este periódico Nahuel González, concejal de Políticas con la Ciudadanía de Gandia, quien estuvo presente en la reunión que la consellera, María José Salvador, mantuvo con los representantes de doce ciudades en las que hay pisos del EIGE.
González remarcó que estas viviendas «no están dirigidas a familias en exclusión social», ya que este tipo de casos son tratados de otra forma y, en el caso de Gandia, ocupan viviendas de titularidad municipal.
La Generalitat cederá la gestión de los alquileres al ayuntamiento, que serán, como administración más cercana, los que se encarguen de evaluar la situación de cada familia que lo solicite. En algunos casos habrá la opción de decantarse por el alquiler con opción a compra. En este caso, el precio no equivaldrá al 30% de los ingresos de la familia pero el precio será mucho más asequible que el de mercado.
