El nuevo gobierno de Gandia ha decidido eliminar la figura del «defensor del ciutadà», sustituyéndolo por una «comisión de quejas y reclamaciones». Mucho podríamos hablar sobre la idoneidad de esta decisión, sobre la figura del «defensor» o sobre los motivos para este cambio, pero lo cierto es que hace ocho meses que los ciudadanos no tienen a nadie a quien dirigirse para velar por los derechos de los ciudadanos en relación con la actuación de la Administración Municipal.
En estos ocho meses el nuevo gobierno no ha tenido tiempo ni siquiera de redactar un borrador de esta nueva comisión, ni siquiera de hablar con la oposición para la confección del mismo. El anterior ejecutivo del Partido Popular tenía ya todo dispuesto para la puesta en marcha de esta nueva comisión, que velara por la defensa de los ciudadanos, pero nadie nos ha consultado, ni se ha interesado por estos trabajos ya realizados, nadie nos ha pedido opinión, consejo ni ayuda para realizar un trabajo que ya estaba prácticamente hecho. Han preferido, como siempre, ignorar a la oposición, romper con todo lo hecho o propuesto anteriormente y comenzar de nuevo, con el retraso que todo ésto conlleva y dejando, indefenso al ciudadano gandiense.
Es cierto que en las comisiones de «políticas sociales y participación ciudadana» se ha informado de que se está elaborando un borrador, que se está trabajando en un proyecto, que se están ultimando los detalles, etc etc? pero también es cierto que los de «primer son les persones» continúan sin dotar a Gandia de una figura que defienda los intereses de los ciudadanos.
No me sirve la excusa de que aún no se ha reunido el «Consell de Participació Ciudadana», ya que no se ha constituido por la desidia y dejadez del gobierno, que debía haber agilizado los trámites para su constitución. Tardaron casi seis meses en constituir las Juntas de distrito. ¿Saben ustedes por qué? Pues porque la Sra. Alcaldesa quería ir a la primera sesión de cada una de ellas y como se pasa más tiempo en Valencia que en Gandia, los vecinos han tenido que acoplarse a su disponibilidad horaria para reunirse? ¿y saben para qué? Para que la Sra. Alcaldesa en cada junta de distrito hiciera lo mismo: política fácil y barata consistente en quejarse del anterior gobierno e intentar explicar la brutal subida de impuestos a la que han sometido a la ciudad.
El año pasado, el gobierno del Partido Popular, dotó a Juan Miguel Lloret de las competencias necesarias para ejercer de «mediador», ya que el anterior gobierno del PSOE había eliminado la oficina de convivencia y mediación. Pues bien, ahora mismo la ciudad está sin oficina de mediación y sin «defensor del ciutadà».
Recuerdo que cuando que quienes ahora nos gobiernan se llenaban la boca de peticiones de más medios y más publicidad para el «defensor del ciutadà». Precisamente ahora, los que todo esto pedían, no sólo no hacen lo que solicitaban sino que, directamente, eliminan la posibilidad de los vecinos de poder defenderse ante la administración.
Ahora, Juan Miguel Lloret, ex «defensor del ciutadà» se ha ofrecido a continuar su labor gratuitamente, hasta que el nuevo gobierno decida qué va a hacer. Es muy de agradecer esta propuesta, más aún si consideramos que cuando cesó en su cargo se quedaron varias quejas y temas pendientes por parte de vecinos de Gandia que llevan todo este tiempo esperando alguna respuesta por parte del ayuntamiento.
En el pleno celebrado el jueves 28 de enero, todos los grupos políticos se mostraron satisfechos por esta propuesta y dispuestos a aceptarla. Quizá esta propuesta hubiera llegado antes si los que ahora nos gobiernan se hubieran sentado a hablar con Juan Miguel Lloret; hubiéramos tenido con ocho meses de antelación lo que ahora todos aplauden. Ahora se abre un plazo de espera, vamos a ver lo que tardan en darle las competencias necesarias para que Gandia pueda volver a tener una persona que se encargue de defender los derechos de todos los ciudadanos. «¿Primer són les persones?».
