El Ayuntamiento de Bellreguard ha procedido a la renovación de la capa superficial de la arena situada en el patio de infantil del colegio Gregori Mayans después de que un análisis realizado hace unos días detectara la presencia de bacterias y hongos que le daban un mal aspecto, aunque, según señaló ayer el consistorio, eso no suponía ningún riesgo para los niños.
A la vista de ese mal aspecto se decidió analizar la arena, y el resultado dio que, debido al uso y a la falta de renovación, contenía hongos y bacterias.
La semana pasada, de acuerdo con la dirección del colegio, se procedió a renovar la arena en una capa de aproximadamente diez centímetros de espesor.
Según señala el ayuntamiento en un comunicado, a partir de ahora se realizarán análisis cada medio año para garantizar la salubridad de ese elemento sobre el que muchos niños juegan en sus ratos de recreo, renovándose cada vez que se considere oportuno.
El alcalde de la localidad, Joan Marco, indicó que con esta acción el ayuntamiento trata de hacer cuanto esté en manos de la Administración local «para que las infraestructuras educativas estén en condiciones óptimas».
