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El juego de Harry Potter llega a Gandia

El «quidditch» es un deporte ficticio practicado por personajes del mundo mágico en las novelas de JK Rowling Es una de las actividades estrella dentro de las XXIV Jornades de Rol, Estratègia i Simulació organizadas por el Consell dels Joves

Da igual que el ser humano no pueda volar o que la «snitch» dorada, la pelota voladora que salía en la serie de novelas y películas de «Harry Potter», no exista en la realidad. Eso no ha impedido que unos jóvenes de Gandia hayan traído el «quidditch» a modo de afición. Se trata de un deporte ficticio practicado por personajes del mundo mágico en la serie de novelas ideada por la escritora británica JK Rowling, y que ya tiene su traslación a la realidad.

El viernes pasado se realizó una exhibición de «quidditch» en la Alqueria Laborde, en el marco de las XXIV Jornades de Rol, Estratègia i Simulació, organizadas un año más por los clubes de rol «El Dragón Beodo», «El Señor de las Pulseras», y la asociación Cheko, con la colaboración del Consell dels Joves de Gandia. Las jornadas finalizan este domingo.

Antonio Mengual, de la asociación «El Dragón Beodo», trajo este juego de simulación a Gandia, aunque empezó a practicarlo en Valencia, donde tiene otro equipo. «Es un deporte de contacto, tiene bastantes similitudes con el rugby pero la diferencia está que el quidditch es mixto», explica el coordinador de la única asociación de «quidditch» de la Safor. «Por ahora estamos intentando federarlo en la Comunitat Valenciana, ya que es un deporte que se está practicando en otros países de forma federada incluyendo campeonatos del mundo», detalla Mengual.

Se juega por equipos y con tres porterías. Son aros sostenidos por un palo donde los cazadores desempeñan un papel muy importante, ya que tratan de marcar gol para sumar 10 puntos e intentar ganar el partido. «No hay requisitos. Admitimos a gente entre los 20 y 30 años porque para practicar el quidditch se necesita forma física, algo que valoramos siempre», señala.

Hay placajes como en el rugby o el fútbol americano, de hecho es una mezcla de algunos de los deportes más masivos. También tiene influencias del «hockey» porque se puede jugar por la parte trasera de las porterías. «El quidditch es como el balonmano, la única diferencia radica en que jugamos con los tubos para simular la película», argumenta Mengual.

Lejos quedan aquellas gradas repletas de gente en Hogwarts con un estadio colosal. La realidad es bien distinta en Gandia, donde se juega en un campo de asfalto, por eso la organización de los organizadores del «quidditch» en Gandia decidieron suprimir los placajes para prevenir daños hasta que dispongan de un campo digno. Tampoco aparecen la Saeta de Fuego, la Nimbus 2000 y 2001 o la Barredora 5; escobas mágicas con las que Harry Potter y sus amigos disputaban los campeonatos en Hogwarts. En Gandia cambian el palo de la escoba por unos humildes tubos circulares montados sobre cañerías de PVC de metro y medio.

Un juego mixto

El equipo está formado por seis integrantes más dos jugadores extra que son los «buscadores». Estos tratan de atrapar la «snitch» dorada que va atada en la parte posterior de la cintura del corredor. En la saga de «Harry Potter» la «snitch» era rapidísima, casi imposible de ver y muy inteligente. Los fanáticos de «Harry Potter» todavía recordarán la escena de la primera partida del joven mago cuando se tragó la «snitch» y consiguió capturarla.

«La regla mínima es que hayan dos personas del sexo opuesto, estamos hablando de un deporte mixto», recalcó Mengual. El «quidditch» respalda la igualdad de género y también ha sido bien acogido por la comunidad«gay». Los balones invaden el campo. No es una piscina de bolas, sino tres balones trascendentales que tienen funciones diferentes. «Tenemos la quaffle que los cazadores tratan de meter entre los aros; luego está la bludger, una pelota prisionera que golpean los lanzadores para noquear, entonces los afectados tienen que tocar sus aros para volver a jugar», detalla Mengual. Los guardianes, uno por cada equipo, desempeñan un papel defensivo porque tratan de evitar que la pelota entre por su aro.

La estrategia es fundamental en este deporte. Cuatro de los seis jugadores de cada equipo se pelean entre ellos por la posesión del balón durante el partido y cada uno de ellos suele plantear sus tácticas en función de la situación de cada equipo. «Hay que tirar desmarques como en el fútbol porque los movimientos son importantes para la fluidez del juego», incide.

Además de las manos, se pueden emplear los pies pero entonces las jugadas están limitadas porque los cazadores solo pueden disparar un balón por jugada.

Repercursión

El juego está teniendo buena aceptación en Gandia. El equipo formado recientemente se llama «Drunken Dragons», se trata de doce jugadores que quieren divertirse con el «quidditch», pero también hacer historia y a ser posible federarlo para que sea reconocido. Los impulsores están a la espera de la creación de otro equipo y poder organizar partidos oficiales.

El próximo mes de septiembre habrá una liguilla de «quidditch» en la Comunitat Valenciana. «Hay dos equipos en Valencia, uno en Vila-real y el nuestro de Gandia, pero nosotros no participaremos porque porque es un club relativamente nuevo», se lamenta Mengual.

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