El funcionario que ha confesado haberse apropiado de parte del dinero que cobraba por la tasa del cementerio, Vicente S. F., dijo ayer, en conversación con Levante-EMV, que está dispuesto a devolver las cantidades que se ha quedado a lo largo de muchos años como encargado de la gestión del cementerio. «No tengo perdón de Dios, esto es muy gordo», aseguraba.
Como ya hiciera ante los servicios jurídicos del ayuntamiento anteriormente, no dudó en reconocer que lo había hecho: «He sido yo», dijo sin tapujos a este periódico.
El funcionario, que ahora está suspendido de empleo y sueldo y que ayer ya no acudió a su puesto de trabajo, asegura que se siente «avergonzado» por lo que ha hecho, lo mismo que su familia, «que está muy afrontada», señaló.
Además, explicó que ya había iniciado el proceso para devolver todo lo que se había quedado correspondiente al año 2015 y que su intención después era la de retornar a las arcas municipales el resto del dinero.
El trabajador explicó que ya ha contactado con un abogado y que su intención es la de colaborar con la administración para resolver el asunto. También reconoció que el desfalco ascendería a entre 150.000 y 200.000 euros.
