Un velero quedó encallado a unos metros de la orilla de la playa de Tavernes de la Valldigna la tarde del pasado lunes. Según ha podido saber este periódico, el barco sufrió un problema eléctrico, lo que hizo que el propietario acabara perdiendo el control y quedando a la deriva. Finalmente, la corriente le llevó hasta la orilla de la playa vallera, donde quedó varado a unos 15 metros.

La curiosa imagen despertó la sorpresa del gran número de personas que se encontraban en uno de los chiringuitos de esta playa, muy cerca de donde encalló el velero. El asunto fue tema de conversación en las redes sociales de vecinos del municipio y turistas.