El Ayuntamiento de Simat de la Valldigna ha aprobado rebajar un 5% el Impuesto de Bienes Inmuebles (IB), que supone su principal fuente de ingresos económicos. Lo ha hecho en un pleno extraordinario y urgente celebrado el pasado jueves que contó con el voto a favor de todos los partidos políticos.

Según datos facilitados por el propio consistorio, esta bajada de los impuestos supondrá una disminución de la recaudación municipal de unos 40.000 euros en el ejercicio 2018.

La medida se ha adoptado mediante la reducción de cuatro puntos del índice con el que se calculan los recibos del IBI urbana, pasando del 0,78 actual al 0,74. En cuanto al IBI rústico, se reduce del 0,885 al 0,840.

La modificación de la ordenanza fiscal pasara a exposición pública durante un período de treinta días. La nuevas ordenanzas entrara en vigor con su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia y comenzará a aplicarse a partir del 1 de enero de 2018. Esta medida se aplica tras revisar la Ordenanza Fiscal que regula esos impuestos municipales.

Simat puede permitirse el «lujo» de reducir los impuestos a todos sus ciudadanos, dado que tiene las cuentas saneadas y la deuda pública es de cero euros. «Eso permite que se puedan rebajar los mencionados impuestos y, de este modo, poder ayudar a paliar en la medida de lo posible la crisis laboral y económica que sufre buena parte de la población», señala el ayuntamiento en un comunicado emitido ayer.

Marga Palomares, concejala responsable del departamento de Hacienda, señaló que «esta disminución del IBI rústico y urbano ha sido, sobre todo, gracias al dinero recibido por el Fondo de Cooperación Municipal, por parte de la Generalitat Valenciana y la Diputación de València conjuntamente, que, además nos permite continuar con las arcas municipales saneadas».