La historiadora y teórica del feminismo Isabel Morant Deusa (Almoines, 1947) celebra que las mujeres hayan conquistado «privilegios antes reservados a los hombres», pero alerta al mismo tiempo sobre las discriminaciones que persisten, como «la desigualdad de los salarios o el diferente reparto de las cargas familiares y sociales», enumeró.

Así se pronunció Morant, actualmente profesora emérita, en el acto en el que recibió la Medalla d'Or de la Universitat de València (UV), celebrado el viernes pasado en el Paraninfo del edificio histórico de La Nau. Además de la homenajeada intervinieron el rector, Esteban Morcillo, el exrector Ramon Lapiedra, y la también historiadora Isabel Burdiel. Lapiedra y Burdiel fueron los encargados de leer la «laudatio». A la sesión asistió el conseller de Hacienda, Vicent Soler; así como diferentes directores generales.

«Hoy podemos decir que las mujeres hemos conquistado los privilegios antes reservados a los hombres; el uso de la palabra, el conocimiento y una mayor presencia y responsabilidad en el espacio público. Decir que somos más libres e iguales y que mantenemos relaciones más cercanas con los hombres», dijo.

«Sin embargo sabemos lo mucho que la sociedad espera de nosotras: que seamos sensibles, amorosas, generosas, cuidadoras y, en fin productoras de la felicidad, de todos, antes de que la nuestra», advirtió. La historiadora también se preguntó sobre la ideología machista persistente, y se respondió: «No sé si es un regreso del pasado o un presente mal construido, desigual y violento». A juicio de Morant «en los últimos años hemos visto crecer la indignación, particularmente de las mujeres jóvenes y de los hombres que las acompañan. Mi impresión es que estas jóvenes, que utilizan un lenguaje nuevo, están abriendo una brecha interesante, conviene escuchar lo que dicen».

La nueva Medalla de la institución concluyó que incluso en nuestros días «podemos observar un fenómeno relevante como son las protestas contra los hombres de poder: actores, cineastas, políticos, que se sienten autorizados a violentar, a violar, a las mujeres, como si fueran propiedad suya. Se diría que en este malestar que se manifiesta en estos días, en Nueva York, en París o en Madrid, se estuviera expresando un malestar mayor; se diría que lo que las mujeres y los hombres temen y denuncian son todos los abusos de poder, de los hombres que tienen poder: me pregunto si no es este malestar el que se expresa en la oposición a Trump».

En su «laudatio» Ramon Lapiedra manifestó que «sin renunciar a nada como feminista, bien al contrario, Morant ha sabido siempre colocarse en su punto justo donde se apoya la palanca que afana en elevar el mundo desde una discriminación secular de las mujeres a nuevas cotas de la igualdad de género». Isabel Burdiel añadió que la historia de las mujeres, tal y como Morant la concibe, «es una historia que está, y que debe seguir estando, unida vitalmente al feminismo».

El rector, Esteban Morcillo, enmarcó el reconocimiento a Isabel Morant en el agradecimiento a toda una generación de mujeres pioneras en la gestión universitaria: «Isabel Morant fue la primera mujer vicerrectora de esta Universitat, uniéndose a ese conjunto de primeras mujeres en el gobierno universitario, como es el caso de Carmen Alborch, también reconocida recientemente con la Medalla de la Universitat, y que fue la primera mujer decana de la Facultad de Derecho, la profesora Carmen Leal, primera catedrática de Psiquiatría de España y primera decana de la Facultad de Medicina, así como Carme Barceló, primera decana de Filología».

Isabel Morant Deusa es profesora emérita de la Universitat de València, una destacada luchadora por la igualdad entre hombres y mujeres y una mujer precursora en la gestión universitaria. Licenciada en Geografía e Historia por la Universitat de València, recibió el premio a la mejor tesina de la Facultad de Filosofía y Letras, centro en el que obtuvo su doctorado, con premio extraordinario.