En un momento en que crece el debate sobre si las falleras deben o no lucir una banda cuando desfilan con el traje regional, lo difícil es encontrar la primera comisión que dé el paso de darle la vuelta a las tradiciones y atreverse a retirar un elemento que en el colectivo fallero ya se había asumido con total naturalidad como una parte más de la indumentaria.
La falla Passeig de Tavernes de la Valldigna, que en 2019 celebra su 35 aniversario, ha decidido que, a partir de ahora, las falleras de su corte de honor dejarán de lucir las bandas que, básicamente, sirven para acreditar a la entidad a la que pertenecen.
La medida fue aprobada hace unas semanas por parte de la asamblea de la comisión. La propuesta, según explicó ayer a este periódico el presidente, Sergio Espinosa, surgió de parte de un grupo de falleras, que considera que los vestidos lucen mejor sin esta prenda, que normalmente, al menos en la capital de la Valldigna, luce la «senyera» cuando se trata de una mujer sin cargo y la bandera de España en el caso de las falleras mayores. La iniciativa, que no iba en el orden del día, sino que surgió durante el turno de ruegos y preguntas, fue respaldada por amplia mayoría de los presentes.
Espinosa aclara que la retirada de este símbolo tiene un carácter «exclusivamente estético» y funcional, ya que, como apuntan los promotores de la propuesta, este elemento tapa la «joia» y otros complementos de la indumentaria que merecen lucir más. Además, cuando llueve y la banda se moja, puede manchar la tela del traje, que es mucho más delicada al contacto con el agua.
Sergio Espinosa apunta que «si la mayoría de las falleras y falleros apoyan esta medida, yo también». Indicaba que «la asamblea es soberana y en conjunto toma las decisiones que afectan al funcionamiento de la comisión».
Actualmente no existe ninguna otra comisión en Tavernes ni tampoco en Gandia ni en Oliva que haya tomado la decisión de eliminar la banda. Sí que es cierto que es una cuestión que las entidades, con la llegada de las nuevas generaciones, están empezando a planteárselo de forma más seria, aunque hasta ahora ninguna se había decidido a dar el paso. Habrá que ver si se produce un efecto dominó y a la Passeig le siguen otras o si esta entidad, que aglutina a unos 350 falleros y falleras, se queda como una «rara avis» en el colectivo festivo.
En sustitución de la banda, las falleras de la Passeig de Tavernes lucirán una «caramba» o «escarapela», una especie de lazo con telas de diferentes colores y ornamentación y una chapa que puede contener el escudo de la falla.
Los hombres sí se quitan el fajín
El reglamento de la Junta Central Fallera obliga al uso de la banda a las falleras pero también del fajín con el escudo para los hombres.
Sin embargo, la evolución no ha sido igual en el caso de ellos y ellas.
En la indumentaria de los hombres ha acabado por desaparecer el fajín con el escudo, incluso en la propia ciudad de València, y ha sido sustituido de forma natural por la faja más tradicional. Ya nadie echa de menos aquel cinturón que cambiaba de color según el cargo. En cambio, la mayoría de comisiones sigue obligando a sus falleras a ir ataviadas con la banda. En los últimos años, muchas han pedido, al menos, poder elegir.
