La Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio ha sacado a licitación la gestión de la línea de autobús interurbano que unirá el norte de la comarca de la Safor, es decir, los municipios de la Valldigna, con Gandia. Este trámite ha permitido conocer de forma pormenorizada todo el proyecto de la conexión, que llega también hasta Alzira.
La novedad más destacada es que, a diferencia de lo que ocurre actualmente, todas las líneas tendrán parada directa en el hospital Francesc de Borja. Esto evitará que los vecinos de Barx, Simat, Benifairó, Tavernes, Xeraco y Xeresa tengan que llegar hasta la estación de Renfe en Gandia y de allí coger el «Urbanet» lanzadera que les lleva hasta el centro médico abierto en 2015.
Otro de los puntos que llama la atención del nuevo mapa es el importante incremento en la frecuencia de paso en municipios como Barx o Tavernes, pero especialmente en Xeraco, donde aumenta de ocho expediciones actualmente en días laborales hasta las 19 de ida y 17 de vuelta, que se implantarán una vez se adjudique el nuevo servicio. Esta cifra supone una subida de 11 pasos más al día (137%). En verano, además, se llegará a las 22 paradas de ida y 20 de vuelta en días laborales.
Fuentes de la conselleria explicaron ayer a Levante-EMV que esta situación se debe a que, actualmente, sí que existen más líneas que pasan por Xeraco, sin embargo, estas, al pertenecer la concesión a diferentes empresas, tienen lo que se conoce como «prohibiciones de tráfico», esto es, que no pueden entrar al municipio a recoger pasajeros.
Este es otro elemento novedoso del nuevo mapa. Se elimina el factor de prohibición porque en la futura adjudicación todas las líneas, incluidas las que llegan a las playas, las gestionará una misma empresa. En estos momentos, cuando por cierto está la concesión caducada, el servicio lo ofrecen diferentes mercantiles.
En el caso de Tavernes de la Valldigna la frecuencia se incrementa en un 50% al pasar de ocho paradas de ida y vuelta al día en jornadas lectivas a 12 de ida y 10 de vuelta en la futura concesión. Además, se implanta un viaje en domingos y festivos, que hasta ahora no existía. En verano, el incremento es aún superior, ya que pasa de seis expediciones de ida y vuelta a 14 de ida y 12 de regreso, mientras que en domingos y festivos pasa de una a dos paradas.
En Tavernes también se cumplirá con una vieja reivindicación, ya que, con el nuevo servicio, las paradas del autobús en la estación de Renfe se coordinarán con los trenes que van y vuelven de València, un servicio muy utilizado.
En el caso de Simat y Benifairó de la Valldigna, la mejora se produce en la conexión con la estación ferroviaria. El servicio, que actualmente se presta a demanda, se realizará ahora mediante transbordo coordinado en Tavernes, disponiendo de siete expediciones diarias de ida y vuelta de lunes a viernes laborables, cuatro expediciones de ida y vuelta los sábados y una los domingos y festivos, por lo que las posibilidades de conexión con la capital comarcal en tren también aumentan para los municipios ubicados más al norte de la Safor.
En el caso de Xeresa, mejora con la conexión con la playa de Xeraco, actualmente inexistente. En invierno se implantará un servicio con tres conexiones de ida y cuatro de vuelta de lunes a viernes laborables. En verano, aumentará hasta las ocho expediciones de ida y vuelta a Gandia de lunes a viernes y cuatro en sábado. Este municipio y Barx mantienen la misma coyuntura y seguirán sin contar con conexión con Gandia durante los domingos y festivos.
El director general de Obras Públicas, Transporte y Movilidad, Carlos Domingo, ha señalado que la Generalitat ha diseñado un Mapa de Transporte Público «atendiendo a criterios de movilidad, operatividad y equilibrio económico, con un plazo de vigencia para de diez años para las concesiones.
Servicio escolar incluido
La Generalitat, en este nuevo proyecto, ha incluido también las líneas escolares. Esto permitirá a las arcas autonómicas ahorrarse 211.000 euros anuales en la gestión de este servicio, que tendrá un coste aproximado de 647.000 euros, según señalaron desde la consellería a través de un comunicado.
