El juzgado de primera instancia número 4 de Alzira ha condenado a un vecino de esta misma localidad a pagar 450 euros de multa porque uno de sus perros mordió al propietario de una parcela próxima a una suya, situadas ambas en el Pla de Corrals, en el término de Simat de la Valldigna.

Según la sentencia, a la que ha tenido acceso este periódico, el juez ve probado que el animal, que formaba parte de una «manada» de varios perros, todos ellos propiedad de la misma persona, atacó al denunciante, vecino también de Alzira, causándole una herida en la pierna.

Los hechos se remontan al 12 de marzo del 2016. Ese día, el herido se encontraba trabajando su parcela cuando aparecieron, según apunta en la sentencia, «alrededor de 13 perros», que estaban «rodeándole y ladrándole», de forma que «se vio obligado a estar más de tres minutos quieto». Finalmente, los animales depusieron su actitud «cuando apareció el dueño, que los controló», indica la resolución judicial. El denunciante recriminó al propietario que no debía llevarlos sueltos.

Pasados unos minutos, el dueño de los perros «volvió a hacer acto de presencia acompañado de otro buen número de perros sueltos y en manada». Los animales volvieron a rodear al hombre, cuando uno de ellos le mordió a la altura de la rodilla.

Ante estos hechos, el herido presentó una denuncia en los juzgados. En su defensa, el propietario de los canes aseguraba que los no eran suyos, sino que eran callejeros y andaban sueltos por la zona. Alegaba también que él no tenía nada que ver con los hechos denunciados y que la herida se produjo por una caída.

A su vez, aseguraba que fue él mismo quien se encargó de llamar a la Policía Local de Simat y gestionar el aviso a la Sociedad Protectora de Animales y Medio Ambiente (Spama) para que se hiciera cargo de los perros y los llevara a su refugio de Gandia.

El magistrado, sin embargo, considera más que acreditado que el denunciado sí que está a cargo de los perros. «De la prueba documental se evidencia que el demandando es poseedor de los animales que componen ´la manada´», indica la sentencia. Y tacha de «interpretación sumamente forzada» la llamada a la policía y a Spama para que se hicieran cargo de los perros. Esta declaración se contradice con el acto voluntario de su mujer, que, en abril del 2016, pocos días después del ataque, autorizó el acceso de la Policía Local para que se llevaran a «ocho perros sin chip y diez cachorros» que se encontraban en la parcela.

En la resolución, además, el juez indica que «el hecho de que los canes estuvieran bajo el dominio y posesión del demandado es porque este se ha estado encargando de su alimentación, cobijo y bienestar». Además, apunta que es él quien «saca a pasear» a los animales «sin atar» y señala que «si los canes no están bajo su posesión y dependencia carece de sentido que los saque a pasear». Por último, el juez, basándose en los informes médicos, considera probado que la herida que presentaba el denunciante fue causada por un perro. De hecho, tuvo que ser vacunado y tratado con antibióticos.