1 - En 1424, a la vuelta de una de las campañas en Córcega y Cerdeña acompañando al Rey Alfonso el Magnánimo, Ausiàs March llegó a su casa de Beniarjó muy debilitado a causa de unas fiebres maltesas adquiridas en el célebre lupanar de Montecatini.

2 - Dioscórides de Pisa, el médico que acompañaba a las tropas del Magnánimo, aseguraba que la causa de la dolencia de Ausias provenía del canto de las sirenas y el rebufo de los Castrati, y aunque lo trató con tintura de ámbar de Aquisgrán y ungüento férrico el poeta no experimentó ninguna mejoría.

3 - Por aquel tiempo, el poeta andaba enamorado de Tecla Borja, hermana de Rodrigo de Borja, futuro papa Alejandro VI. A sus males físicos se sumaban sus grandes dudas espirituales que le hacían debatirse entre el amor espiritual y el amor carnal, al que tanto afectaba ahora su actual dolencia testicular.

4 - Profundamente preocupado por aquella disfunción eréctil, el poeta optó por recurrir al célebre médico Arnaldo de Vilanova. Tras palparle el hígado, observarle el iris de sus ojos y realizarse el introito anal, le dijo: No creo que haya remedio para vuestros males. Si acaso podíais probar a fortaleceros con zumo de naranjas.

5 - Ausias no se lo pensó dos veces y construyó un laboratorio de alquimia para descubrir todos los secretos que encerraban los cítricos. Rodeado de alambiques, matraces y retortas realizó cientos de experimentos mezclando el zumo de naranja con los más variados y extraños ingredientes. Hasta que, al fin, encontró la fórmula que le hizo famoso.

6 - El resultado de aquel elixir, que bautizó como «Licor del Paraíso», fue portentoso. No solo le curó las fiebres contraídas en el lupanar, sino que comprobó en carne propia que también favorecía las potencias de su miembro viril; de ese modo que el platónico amor se convirtió en pasión y la disfunción eréctil desapareció como por encanto.

7 - En 1492, cuando Rodrigo de Borja fue elegido papa con el nombre de Alejandro VI, su hermana Tecla le mandó a Roma con la galera cargada de magníficos regalos que las autoridades de Valencia mandaban a su antiguo Obispo, una barrica de roble conteniendo el mirífico «Licor del Paraíso».

8 - Durante el banquete del día de la coronación, el Papa presentó el licor a los miembros del Sacro Colegio Cardenalicio y a sus ilustres invitados que, tras probarlo, no dudaron en alabar sus propiedades y virtudes, llegando a ser bendecido por el Cardenal Sforza que lo calificó como «Santa Mixtura».

9 - También la esposa del Pontífice, Madonna Vannoza, y sus hijos César y Lucrecia, quedaron tan maravillados con el licor que les mandó su tía Tecla desde Valencia, que los servía en todo tipo de reuniones y en poco tiempo aquel «Licor del Paraíso», por sus extraordinarias propiedades, se hizo famoso como la «Pócima de los Borgia».

10 - Cuando en 1485 el Papa Alejandro compró a a los Reyes Católicos el Ducado de Gandia para sus hijos, tuvo mucho cuidado en que se comprara a Ausiàs March la fórmula del «Licor del Paraíso» y el laboratorio de alquimia donde se preparaba para que el preciado licor nunca faltara a los miembros de la familia.

11 - Tras la muerte de Pedro Luis de Borja, I Duque de Gandia, su hermano Juan vino a Gandia para casarse con María Enríquez. A partir de entonces, el «Licor del Paraíso» se convirtió en la bebida oficial del Palacio ducal de Gandia. Y se administraba gratuitamente a los enfermos.

12 - El IV Duque, Francisco de Borja, fue el último Borja que se ocupó de mantener viva la presencia del «Licor del Paraíso» o «Pócima de los Borja-Borgia». Años más tarde, a la muerte de su esposa, Leonor de Castro, ingresó en la Compañía de Jesús, dejó de producirse el licor y la fórmula secreta pasó a los archivos de la Compañía.

13 - El pintor Tiziano, amigo del IV Duque de Gandia, le obsequió con una copia original de su cuadro Venus, Cupido y Naranjas, en el que aparecen Tecla Borja y el poeta Ausias March simbolizando toda la maravillosa historia de tan singular licor. Al fondo se ven la Alquería del Duc y el Castillo de Bayrén, dos edificios singulares del Ducado de Gandia.

14 - Con motivo de la desamortización de Mendizábal, la fórmula del licor desapareció, entre otros muchos documentos, del archivo de la Compañía de Jesús. En el año 1992 se encontró en un anticuario de Londres un legajo de la familia Borja, entre cuyos pergaminos estaba la célebre fórmula.