El Ayuntamiento de Gandia ha prohibido la circulación en toda la ciudad de los patinetes eléctricos con asiento, también llamados “minimotos” o “chopper”. No podrán transitar ni por aceras, zonas peatonales, carriles bici ni tampoco por la calzada. Quien incumpla esta norma podrá ser multado con 200 euros e incautación del vehículo. Así lo anunciaron ayer Àngels Pérez, concejal delegada de Seguridad, y Marc Cuesta, jefe de la Policía Local. “Hemos tenido muchas quejas y hemos de garantizar la seguridad”, ha explicado Àngels Pérez, “especialmente en la fachada marítima”. El verano pasado, la policía local tuvo constancia de “tres atropellos y una caída en el paseo marítimo”, afirma Cuesta.

El ayuntamiento ha adaptado la ordenanza de circulación “a la nueva realidad de la ciudad”, según Pérez. Estos aparatos, “al no ser considerados como vehículos de motor, necesitan tener una regulación específica”, basándose en una instrucción de la Dirección General de tráfico (DGT) de diciembre de 2016.

La ordenanza de circulación también establece que el resto de vehículos eléctricos que la DGT califica del tipo A (de una o dos ruedas, patinetes eléctricos, segway, etc. de menos de 25 kilos de peso y velocidad inferior a 20 Km/h.) podrán circular por carriles bici, zonas peatonales y aceras con una amplitud mayor a tres metros “siempre que se adapten a las circunstancias y circulen, como máximo, a la misma velocidad que el resto de peatones”. Sin embargo, no podrán circular por la calzada.

Según Cuesta, el departamento de Tráfico ha mantenido varias reuniones con los propietarios de negocios que alquilan este tipo de aparatos para intentar minimizar los peligros que se provocaban. "Desgraciadamente no hemos obtenido la colaboración esperada”. “Algunos de estos vehículos que se alquilan superan por más de 15 la potencia permitida y en algunos casos llegan a los 30 kilómetros hora".