La Semana Santa de Gandia fue declarada en la década de los 80 fiesta de Interés Turístico. Desde ese momento, y durante varias legislaturas, el Ayuntamiento del municipio ha luchado por proclamar esta celebración como Fiesta de Interés Turístico Nacional.
El concejal delegado de Semana Santa, Ciro Palmer, llevó esta propuesta a la Junta de Gobierno y, posteriormente, el pleno del ayuntamiento aprobó iniciar la tramitación, un hecho que todavía no se había llevado a cabo con los anteriores gobiernos. A partir de ahí, varios miembros del consistorio han estado trabajando para que la iniciativa se eleve a la conselleria de Turisme que, tras su aceptación, será estudiada por el ministerio de Turismo.
Sin embargo, el concejal señaló, en declaraciones a este periódico, que el principal «obstáculo» con el que se encuentra esta fiesta es «lograr el impacto mediático a nivel nacional». Para conseguirlo, la Semana Santa debería tener veinte impactos, es decir, debería aparecer en veinte informaciones tanto en radio, prensa como televisión nacional. Por lo tanto, «hay que crear la noticia y después venderla», apuntó Palmer, aunque desconoce las características que debería poseer este tipo de informaciones. Una vez publicadas, deben ser estudiadas por el ministerio y «si no se cumplen los requisitos, queda suspendida la proclamación hasta que se produzca esta difusión».
El concejal explicó que se trata de una propuesta que «pone en valor el turismo en la ciudad», ya que la temporada, que se inicia con las Fallas, podría enlazarse con la Semana Santa y el verano. Además, Gandia ha desarrollado noventa puntos estratégicos a lo largo del municipio con el fin de promocionar esta fiesta. A esta se le suma el aliciente de que Gandia cuenta con una playa con distintas zonas de ocio para los más jóvenes y un clima que permite «pasar el día en la costa y disfrutar de la procesión por la noche».
Además, la ciudad se diferencia del resto de municipios por la realización de algunas actividades, como el viacrucis viviente o las representaciones teatrales del Visitatio Sepulchri, donde se escenifica el Entierro y la Resurrección de Jesús. Por otra parte, durante el Viernes Santo, por las calles de Gandia desfilan cronológicamente todas las imágenes de las diferentes cofradías a la vez, un hecho que no se produce en el resto de ciudades.
Palmer destacó que estas actividades no solo se llevan a cabo durante la Semana Santa, sino que se realizan durante el resto del año, como la XXXVII exposición diocesana.
Esta declaración supondría que Gandia se sumara a los destinos turísticos religiosos en las agencias de viajes o que apareciese en mayor medida en los medios de comunicación.
