La Policía Nacional ha detenido a dos mujeres como presuntas autoras de al menos diecisiete hurtos a personas de avanzada edad. Algunos de los asaltos se produjeron en Gandia, aunque principalmente actuaron en Benicàssim y Vila-real. Las arrestadas podrían pertenecer, según la Policía Nacional, a una banda organizada en la que están perfectamente diferenciados los roles a realizar por cada uno de los componentes.

La organización cambia con asiduidad a las mujeres que sustraen las joyas, para así dificultar la labor policial. Las arrestadas se acercaban repentinamente a sus víctimas «intentando acariciarles, pidiendo favores sexuales, invadiendo su espacio personal, aprovechándose del estupor de la persona» para quitarles medallas, relojes, cualquier tipo de joya a la vista o carteras.

La mayoría de estos robos no eran violentos, aunque en ocasiones las víctimas, dada su elevada edad, sufrían lesiones por caídas al intentar zafarse de las autoras, señalan fuentes policiales. La investigación se inició tras recibirse varias denuncias por parte de varios ancianos que aseguraban haber sufrido una serie de hurtos, todos ellos con el mismo «modus operandi», por el denominado «hurto amoroso o de abrazo».

La investigación hizo llegar a los agentes hasta las localidades de Vila-real y Benicàssim, donde fue visto un vehículo ocupado por las ahora detenidas, que podrían ser las autoras de los hechos. Tras comprobar las pesquisas que se habían realizado haste al momento, se practicaron las detenciones de las mujeres como presuntas autoras de las sustracciones, responsabilizándoles hasta el momento de diecisiete hurtos realizados todos ellos en la provincia de Castellón.

La investigación continúa abierta sin descartarse nuevas detenciones ni la imputación de nuevos hechos a las detenidas por robos en otros puntos.