El Ayuntamiento de Gandia ha puesto en marcha, con éxito, uno de esos mecanismos urbanísticos diseñados hace doce años para promover la construcción de hoteles, especialmente en la playa, su primer atractivo turístico. La empresa Infilev SL promoverá y ejecutará un edificio de doce alturas destinado a hotel de cuatro estrellas con doscientas habitaciones en la parcela de unos ocho mil metros cuadrados que antes ocupaban los apartamentos Los Álamos.

Se trata de la confluencia de las calles Illes Balears y Atlàntic, en el núcleo antiguo de la playa, que era conocida por albergar chalets de «los alcoyanos», construidos a partir de los años 50, cuando la playa empezaba a tomar auge y desde aquella ciudad se aprovechó la existencia del tren para situar a Gandia como su primer destino vacacional.

En ese lugar la empresa promotora había proyectado construir edificios de apartamentos, pero el ayuntamiento, tras una negociación de meses que ha acabado con acuerdo, sugirió que una parte albergara un hotel. Al final se harán las dos cosas. Sobre 2.800 metros cuadrados se levantará el establecimiento turístico, que tendrá doce alturas, dos más de las permitidas, gracias, precisamente, a ese mecanismo urbanístico aprobado hace doce años. A cambio, la empresa cede para uso público un espacio de 300 metros cuadrados que se reservará a jardín, contribuyendo así a «esponjar» una trama urbana que se edificó, como casi todo en los años 50 y 60 del siglo pasado, sin tener en cuenta eso que hoy se llama «calidad urbanística» y muy lejos de la «calidad turística» que el ayuntamiento quiere para seguir siendo un destino preferente para los visitantes de dentro y fuera de España.

En el resto de la parcela, compuesta por unos cinco mil metros cuadrados, se levantará el edificio de apartamentos que la empresa quería, pero con un máximo de diez alturas, sin que aquí se aplique excepción alguna.

Morant: «La ciudad funciona»

Fueron la alcaldesa de la ciudad y el responsable de Urbanismo, Diana Morant y Vicent Mascarell, quienes se encargaron de anunciar ayer este acuerdo entre la empresa Infilev y el ayuntamiento. Y ambos consideraron que se trata de una «buena noticia» fruto de la visión que tuvieron otros políticos, entre quienes citaron al exalcalde José Manuel Orengo, para incluir «una planificación urbanística moderna» que, con el paso del tiempo, facilitara primero renovar la trama urbana de zonas antiguas, como es el caso, y, en segundo lugar, promover actividades económicas relacionadas con el turismo y la capitalidad de una ciudad, como es la instalación hotelera que se va a levantar.

Morant también señaló que esta futura inversión privada, cuya cuantía económica aún no se ha desvelado pero que alcanzará decenas de millones de euros, demuestran «que la ciudad funciona». «Podrían haber elegido otro lugar, pero nos han elegido a nosotros porque hemos devuelto el clima de confianza, honestidad y tranquilidad en la ciudad», añadió la alcaldesa mientras agradecía a la promotora su apuesta por Gandia.