La concejalía de Educación de Oliva, dirigida por Yolanda Pastor, ha iniciado la retirada de las marquesinas de fibrocemento existentes en el colegio Lluís Vives aprovechando el período estival. Por ello, el centro ha estado precintado siguiendo la normativa del protocolo de actuación.

Los trabajos terminarán esta semana y se encuentran dentro del proyecto de mejora del centro, que cuenta con un presupuesto de 266.646 euros y en el que se incluye la reforma de los baños y la sustitución de la valla perimetral del recinto. Los trabajos se han realizado por parte de una empresa especializada.

Pastor recordó que estos materiales no suponen ningún riesgo directo, pero que, en caso de descomposición, comportaría la liberación de fibras tóxicas peligrosas si se inhalan.

Para llevar a cabo la retirada de este material, la secretaría del centro ha sido trasladada a varios metros del colegio durante el mes de julio. Además, durante esta semana, se terminarán las obras de remodelación de la valla perimetral exterior del colegio Desamparats y se llevará a cabo el repintado, la limpieza integral, las revisiones eléctricas y otras obras en el resto de centros.

Pastor señaló que «desde el departamento de Educación se está haciendo un gran esfuerzo para tener los centros educativos como se merecen». «Por eso, trabajamos conjuntamente con la conselleria de Educación para que nuestros niños y niñas tengan las mejores condiciones en sus centros», destacó la edil.