El departamento de Turismo del Ayuntamiento de Oliva ha mejorado el servicio de socorrismo y salvamento de sus playas. A través del nuevo contrato formalizado con Cruz Roja, entidad que se ha adjudicado la prestación de este servicio este mismo año, ha ampliado tanto el número de socorristas que se encargarán de velar por la seguridad de los bañistas como de puntos de atención.
Así, en la playa de Terranova-Clotal existen dos puntos de vigilancia con dos socorristas cada uno, en la playa de Terranova-Burguera un punto de vigilancia y una posta sanitaria auxiliar y cinco socorristas en total.
La playa de Pau Pi dispone de tres puntos de vigilancia y una posta sanitaria central con una dotación total de 13 socorristas incluyendo responsables, patrones y conductores, y también dispone de la ambulancia que cubre el servicio en la totalidad de playas con vigilancia con una dotación de 2 TES y una enfermera y un quad y una moto acuática.
La playa del Aigua Blanca Urbana, dispone de un punto de vigilancia y una posta sanitaria auxiliar, con una dotación de 5 socorristas. Rabdells dispone de dos puntos de vigilancia con cuatro socorristas en total.
En Aigua Morta hay cuatro puntos de vigilancia con 15 socorristas, incluyendo responsables, patrones y conductores, y dispone también de un quad y una moto acuática. En cuanto a Les Deveses se pueden contabilizar dos puntos de vigilancia con cuatro socorristas en la zona.
Respecto al baño adaptado, el litoral de Oliva cuenta con dos puntos de atención permanente en la plaza de Europa, en la playa de Pau Pi, y de la posta sanitaria de la calle Jacomart y en la playa del Aigua Morta. En Terranova-Burguera se habilita previa petición de 48 horas antes a Cruz Roja.
En total, las playas de Oliva cuentan con 15 puntos de vigilancia de proximidad, cuatro postas sanitarias con 44 socorristas, dos TES, una enfermera, dos conductores de quad, dos patrones de motos acuáticas, dos responsables de postas principales, un coordinador de salvamento y cuatro técnicos para el baño adaptado.
La concejala de Turismo y Playas, Mireia Morera, afirmó ayer que «la seguridad en las playas es primordial para acoger a la gran cantidad de usuarios que disfrutan de ellas y poder ofrecerles localidad que merecen». La edil reconoce que estas mejoras suponen «un coste económico importante» y, por lo tanto, «creemos que hay que aplicarlas con responsabilidad».
