Las tormentas con aparato eléctrico que se dejaron sentir en la Safor entre la noche del viernes y ayer por la mañana, especialmente entre las 10 h y las 11 h, causaron algunos percances, aunque en general tuvieron más efectos beneficiosos que perjudiciales, sobre todo para el campo y para refrescar el ambiente tras unos días marcados por la ola de calor.
En Bellreguard cabe destacar que se inundó el badén de la carretera que une el núcleo urbano con la playa, con tal mala fortuna de que un vehículo se quedó atrapado por la mañana. El incidente no causó heridos, y cuando bajó el nivel del agua el vehículo fue retirado por una grúa.
En la Font d'en Carròs cayó un rayo en el remate de un bloque de viviendas situado en el número 4 del Camí Vell de Gandia y provocó el derrumbe de varios cascotes, que afortunadamente fueron a parar a la terraza y no a la calle, no obstante la Policía Local puso vallas en la vía pública. Curiosamente es la segunda vez que impacta un rayo sobre esta misma finca.
Además, Bomberos del Consorcio Provincial realizaron cinco servicios en Gandia para achicar agua de varias viviendas.
Según Aemet la precipitación acumulada desde el viernes hasta las 10.30 horas del sábado fue de 106 litros por metro cuadrado en Xeresa; 101,4 en Barx (más que en los cinco meses anteriores); 88 en la Font d'en Carròs; 50,3 en Palma de Gandia; 49,6 en Tavernes de la Valldigna; 47,4 en la playa de Xeraco y 40 en Piles.
