El tramo de la carretera N332 comprendido entre el casco urbano de Oliva y el Molinell, donde entra en la comarca de la Marina Alta y la provincia de Alicante, figura como uno de los más peligrosos de la Comunitat Valenciana. Y también existen otros problemas, como la ausencia de accesos desde esa vía a las áreas industriales del sur de esta ciudad, concretamente la de Jovades.

Precisamente para solucionar ambos problemas, el Ayuntamiento de Oliva se ha dirigido al Ministerio de Fomento para plantearle un proyecto que, con un coste económico reducido, tendría enormes beneficios en el ámbito urbanístico y en la seguridad en la carretera.

Según explicó ayer el alcalde de Oliva, David González, la idea consiste en la ejecución de un vial paralelo a la N332 desde el paso sobre la rambla de la Gallinera hasta las gasolineras de Oliva Nova. De esa manera, no solo habría acceso directo al polígono de Jovades, sino también a las futuras zonas industriales previstas en esa misma zona.

Pero es que, además, se eliminarían nada menos que trece enlaces en «T» a la N332, considerados trece puntos negros de la red viaria, donde se producen numerosos accidentes porque los vehículos que se incorporan a la carretera desde los caminos perpendiculares tienen que invadir o uno o los dos carriles en un tramo de altísima densidad de tráfico, especialmente en verano.

El alcalde de Oliva explicó ayer a este periódico que eso no es solo una idea, sino que el Ministerio de Fomento, a propuesta del ayuntamiento, ya está llevando a cabo un estudio de viabilidad que, según estiman los técnicos, tiene todos los visos de ser favorable. De hecho, Fomento no puede más que ver con buenos ojos una propuesta para reducir la siniestralidad en el tramo de una carretera de su competencia que, además, se ejecutaría con un presupuesto estimado de 1,5 millones de euros frente a los 4 millones que cuesta un plan con el mismo objetivo que incluía un paso elevado sobre la N332 cerca del ya existente en Oliva Nova y que no se ejecutó por la paralización del desarrollo de nuevas zonas industriales al sur de la ciudad.

El pleno de Oliva votó por unanimidad la propuesta del alcalde para poner fin a lo que considera «una situación irregular y atípica» por la falta de accesos al polígono de Jovades, que se produce desde su misma construcción, hace cerca de 20 años.

El alcalde, que confía en la rápida respuesta de los técnicos y en el inicio de la tramitación para hacer posible la obra, añade que se trata de una actuación que coincide plenamente con los planes del Ministerio de Fomento para eliminar puntos negros en el tramo de la N332 entre Oliva y el Verger, un tramo peligroso de la red viaria española que llegó a tener proyectos para desdoblarse en autovía, algo que posteriormente quedó descartado por motivos económicos y porque, el 1 de enero de 2020, la autopista AP7, que circula en paralelo, será gratuita.