Ángel Arcos, el joven gandiense enfermo de Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) que recorrió los 1.300 kilómetros que separan la capital de la Safor de Santiago de Compostela ya está en casa. Ayer por la noche llegaba en coche desde València, donde había viajado en tren desde Galicia. Junto al instituto Ausiàs March le esperaban familiares y amigos que, con pancartas, globos, pitos y entre aplausos le recibían como un auténtico campeón.

Arcos se mostró sorprendido por la acogida y agradeció todas las muestras de cariño recibidas, no solo ayer, sino durante los 44 días que ha durado su reto.

El joven completó el trayecto a mediodía del pasado domingo. A través de una conexión en directo en la página de Facebook del reto, anunciaba que se encontraba a escasos metros de la plaza del Obradoiro, donde se encuentra la catedral de Santiago y donde se encuentran todos los peregrinos que culminan el camino del apóstol.