La puesta en marcha del nuevo servicio de ferri entre Gandia y las Baleares, que permite el transporte de mercancías, supone una importante oportunidad para que las empresas de la comarca de la Safor y otros territorios limítrofes puedan exportar sus productos hasta las islas de una forma rápida y directa. Si, como ha ocurrido con los pasajeros, esta opción resulta exitosa, va a suponer que el tráfico de camiones que ya soporta el Grau con la actividad ordinaria del puerto se va a multiplicar.

Esta situación hace imprescindible la finalización de las obras del acceso sur al puerto, unos trabajos que se están llevando a cabo desde hace años y que avanzan poco a poco.

Esta infraestructura permitirá que los camiones que llegan desde Alicante puedan, desde la rotonda de Bellreguard, acceder directamente al recinto portuario sin necesidad de callejear por e Grau, algo que causa molestias a los vecinos y genera mayor inseguridad. Actualmente, una de las infraestructuras más importantes de esta obra, el puente que cruza la desembocadura del Serpis ya está construida, por lo que cada vez queda menos para que esta carretera se ponga en servicio.

Las obras del acceso sur al puerto de Gandia arrancaron en el año 2010, aún con el PSOE en el Gobierno. Con el cambio en el Ejecutivo se paralizaron durante algunos años. A principios del 2015 se reanudaron los trabajos, que han ido avanzando de forma intermitente. La inversión para la infraestructura es de 20 millones de euros que pone el Ministerio de Fomento.