El Instituto de Conservación y Restauración de la Generalitat Valenciana (Ivacor), ha restaurado la imagen de la Virgen del siglo XV que estaba en la fachada del templo parroquial de Santa Maria la Major y que será presentada mañana jueves a las 20 horas en el propio templo parroquial, con el plebán Fernando Cremades al frente.

Se trata de una de las esculturas más valiosas de la parroquia y a la presentación acudirán Gema María Contreras, subdirectora del Ivacor, y Fany Sarrió, jefa de la sección de pintura policromada, que explicarán los detalles del proceso. Finalizado el acto tendrá lugar la bendición de la imagen restaurada y posteriormente un breve recital a cargo de la Coral Santa Cecilia de Oliva.

La parroquia de Santa Maria encargó a finales del siglo XX al profesor de escultura de la Universitat de València, José Luis Roig, la confección de una nueva imagen de la Virgen María de un estilo similar a la existente con anterioridad, que tuvo que ser retirada debido al deterioro que presentaba, a pesar de su gran interés artístico. El proyecto fue acabado y la nueva imagen se bendijo en septiembre del año 2000 dentro de las fiestas de la Mare de Déu del Rebollet.

La nueva imagen representa a la Virgen María con su hijo en un brazo y una bola en la otra. Se realizó con un color piedra natural, similar a las otras dos figuras existentes en el conjunto de la portalada y que representan a San Antonio de Padua y a San Francisco de Asís, dos figuras con mucha devoción en esta localidad a lo largo de los años.

La imagen de la Virgen María que se retiró de la fachada, tallada en madera, fue datada en una primera impresión por parte de los especialistas en arte entre los siglos XV y XVI. De características borgoñosas, perdió la policromía. En un brazo sostiene al niño Jesús y en otro un lirio, ya desaparecido. La talla, de un metro de altura, treinta y cinco centímetros de anchura y veintiuno de profundidad, fue afectada por la carcoma y por los efectos medioambientales al estar expuesta tanto a la lluvia como al sol a lo largo de muchos años, a pesar de su valor.

El rostro de la Virgen, con una sonrisa, mira al frente en gesto sereno y tranquilo. Jesús tiene las piernas cruzadas y su brazo izquierdo reposa en la mano de la Virgen, mientras que el derecho está en actitud de bendición. Los cabellos y las vestiduras de las figuras, de excelente factura, muestran las características de la época en la que se hizo.

Tras retirarla de la fachada se ubicó en uno de los laterales del altar mayor que da acceso al interior de la sacristía, a la espera de que fuera remitida al Centro Técnico de Restauración de la Generalitat para el inicio del proceso de recuperación. Una vez realizado el trabajo ahora se volverá a exponer en el templo parroquial olivense, en esta ocasión en el interior para evitar que se deteriore.