La playa de l'Auir de Gandia, ese espacio a veces glorificado por el milagro de haber sido un tramo de litoral virgen que sobrevivió a la vorágine constructora o destructora de la costa, es el centro de la exposición inaugurada anoche en la sala Coll Alas de la plaza de l'Escola Pia de Gandia. En realidad se trata de una triple exposición, porque l'Auir ha inspirado a tres creadores locales.

Patrocinada por los departamentos de Cultura y de Gestión Responsable del Territorio del Ayuntamiento de Gandia, Pep Aparisi enseña 62 fotografías tomadas a lo largo de los dos últimos dos años. Todas en blanco y negro, en muchas de ellas se centra en detalles que, quizás, pasan desapercibidos a quienes recorren, en invierno o en verano, esta zona situada entre los inmensos bloques de hormigón de las playas de Gandia y de Xeraco.

En 28 de esas imágenes, presentadas en un tamaño más pequeño y en todos los casos con la cámara apuntando al cielo, Aparisi combina la imagen con otros tantos textos del gandiense Rafa Gomar, a quien l'Auir también ha inspirado. En la lectura, en todos los casos breve, relaciona a personajes reales, como Peirona March, hermana del poeta Ausiàs, con leyendas y hechos ficticios.

El conjunto es otra de las creaciones fotográfico-literarias o «fototextos» del tándem Aparisi-Gomar, que ha tenido varias versiones anteriores, tanto en modo exposición como en la edición de libros.

La tercera aportación sobre l'Auir en la muestra abierta ayer son las 10 cajas-libro de Conxa Peiró en las que la autora ha combinado la aportación de materiales recogidos en la misma playa de l'Auir con los dibujos pintados al óleo e impresiones digitales.

La muestra, titulada tan sencillamente, La platja de l'Auir, fue inaugurada anoche en presencia de los autores de las obras, y permanecerá abierta hasta el 5 de enero con entrada libre.