La semana pasada el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, comparecía en el Senado y anunciaba, al referirse el proyecto del Tren de la Costa, que su departamento iba a «anticipar» un tramo de esa actuación, concretamente la que consiste en la duplicación de la vía férrea entre Cullera y Gandia.

Dicho y hecho. Ayer la empresa pública Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), aprobaba la licitación, por un montante de casi dos millones de euros, de la redacción de ese proyecto. Este paso supone entregar a una empresa el diseño de la obra y una valoración aproximada de su coste, que seguro que será de decenas de millones de euros.

El contrato licitado ahora, correspondiente a la línea de Cercanías C-1 de València, tiene un plazo de ejecución de 18 meses y contempla disponer del proyecto para los 22 kilómetros del tramo, actualmente de vía única, y su electrificación, según señaló ayer el Ministerio de Fomento.

La actuación forma parte del Plan de Cercanías en la Comunitat Valenciana que, hace un año, firmaron el entonces ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, y el presidente de la Generalitat, Ximo Puig. La intención es que desde Gandia a València los trenes circulen siempre en una plataforma de doble vía, lo que supondrá incrementar considerablemente la capacidad de tráfico y las prestaciones del servicio ferroviario. Según señala el Ministerio de Fomento, esta licitación «constituye un paso previo para poder dar continuidad a la línea que prevé su prolongación en el denominado Tren de la Costa», concretamente hacia Oliva y después, hacia Dénia y Alicante.

Para duplicar la vía férrea entre Cullera y Gandia la empresa que se adjudique la redacción del proyecto deberá tener en cuenta dos tramos que revisten una gran complejidad a la hora de ejecutar las obras, que no tienen fecha concreta pero que no serán antes de, al menos, dos años y medio.

Se trata de los dos túneles, de vía única, existentes en ese recorrido. Uno es el de xeraco, con cerca de un kilómetro de longitud, que discurre bajo la avenida de la Comunitat Valenciana, prácticamente sobre las viviendas, y otro es el de Gandia, construido siguiendo el trazado de la calle Perú, desde el instituto Tirant lo Blanc hasta la misma estación subterránea.

En ambos casos, si la decisión del equipo de ingenieros que redacte el proyecto es mantener el mismo trazado, las futuras obras obligarían abrir en canal el casco urbano de Xeraco y cerca de un kilómetro de la ciudad de Gandia, con todo lo que eso significa. Mucho más sencillo será prolongar el tren hacia Oliva, dado que, desde la estación gandiense hacia el sur sí que se diseñó y se construyó un túnel en doble vía que bajo las calles de Marqués de Campo, Magistrat Català y del Tossal, llega hasta la misma confluencia con la avenida del Grau. Ambos ayuntamientos mirarán con lupa el trabajo que realice la empresa.