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Un fenómeno en las redes sociales

Planeta contactó con los autores tras ver el éxito de su perfil en Facebook, con más de 100.000 seguidores

Equipados «de época». levante-emv

La gota que colmó el vaso de su cabreo con el fútbol actual tuvo lugar en 2014, cuando Carlos vio por la televisión, en un amistoso previo al Mundial de Brasil, que la selección española estaba jugando en casa contra Italia con una camiseta negra por cuestiones de márketing. «Totalmente defraudado le escribí por Whats App a Miquel ¿Has visto esto, tío? y él me respondió pues no sé, monta una página de Facebook». A los pocos minutos Carlos había creado la cuenta «Odio el fútbol moderno», de la que también hizo administrador a Miquel.

Empezaron a subir fotos y comentarios y el perfil fue creciendo hasta hoy: más de 100.000 seguidores, en España, México, Argentina, Italia, o de españoles residentes en el extranjero. Ante este éxito un editor de Planeta contactó con ellos hace dos años para proponerles recopilar la idea y todo ese material en un libro. Tras seis meses de trabajo, los gandienses completaron el encargo.

La idea era publicarlo antes del Mundial de Rusia, pero se demoró y finalmente salió a principios de octubre. El libro ya va por la segunda edición tras haber agotado la primera, con más de 3.500 ejemplares. Otro factor de su éxito es la nostalgia ochentera en la que estamos instalados desde hace unos años, de hecho Planeta también edita los libros «Yo fui a EGB», otro fenómeno que también saltó desde internet.

Además de Facebook «Odio el fútbol moderno» también tiene cuentas en Twitter, Youtube e Instagram, esta última con más de 10.000 seguidores. Administrar estas redes también les lleva su tiempo cada día, después de sus respectivos trabajos; Miquel es camarero y está afincado en Barcelona y Carlos es profesor de Secundaria en Los Naranjos y en el colegio San José de la Montaña.

Con todo, pese a «odiar» al fútbol moderno, Carlos y Miquel siguen siendo unos apasionados de este deporte de masas: «Seguimos deseando que, con un arma tan poderosa como el fútbol, las principales figuras de este deporte proclamen mensajes por un mundo más solidario, libre de racismo, xenofobia y homofobia».

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