Cientos de agricultores y propietarios de plantaciones de cítricos protestaron ayer, a las puertas de numerosos ayuntamientos de la Comunitat Valenciana, para exigir a la Administración que adopte medidas urgentes ante las graves consecuencias que, en forma de pérdidas económicas, está suponiendo la llegada de naranja de otros países, especialmente Sudáfrica. Los agricultores quieren trasladar a la Unión Europea su queja por la política que permite la entrada masiva de productos que, debido a sus bajos precios, arruinan las explotaciones valencianas. En la Safor una de esas protestas, como se observa en la imagen tuvo lugar ante el Ayuntamiento de Bellreguard. Paralelamente los partidos políticos están respondiendo con la presentación de mociones para que los ayuntamientos exijan medidas urgentes. L'Alqueria de la Comtessa aprobará hoy esa moción, que solicita medidas compensatorias y una cláusula de salvaguarda para la agricultura valenciana.