Hace muchos años que se espera la intervención de los propietarios en el edificio en ruinas que se encuentra justo en frente del Palau Ducal de Gandia, pero lo cierto es que el tiempo pasa y el inmueble, en cuya planta baja existe una afamada zapatería, se sigue degradando. Debido a las intensas lluvias de este otoño hace unos días se detectaron pequeños desprendimientos, lo que obligó a situar unas vallas para minimizar el riesgo sobre los muchos peatones que circulan por la calle del Duc Alfons el Vell, una de las más transitadas de la ciudad. Ese edificio está protegido porque forma parte del entorno del Palau Ducal, declarado Bien de Interés Cultural, y las fachadas no pueden derribarse. A la derecha de la imagen, las vallas colocadas en la acera, ayer.