El Ayuntamiento de Gandia ha encontrado un fórmula para poder conciliar el ocio con el descanso de los vecinos: Habilitar un espacio en el que se puedan celebrar festivales musicales, conciertos y otro tipo de eventos de gran envergadura y que se encuentre en una zona lo suficientemente alejada de las viviendas para evitar las molestias por el ruido pero que, además, ofrezca facilidades para que los asistentes puedan llegar sin muchos problemas a los comercios y locales de hostelería del casco urbano. Ese punto se encuentra en el polígono Benieto-Ciutat del Transport y se habilitará en una parcela de titularidad municipal.

El único edificio al que podría llegar el sonido que emana de los altavoces es el hospital Francesc de Borja, ubicado en el próximo polígono de Sanxo Llop, aunque todo dependerá de la orientación del equipo de sonido. En caso de que eso ocurra siempre se podrá recurrir a la instalación de pantallas acústicas que mitiguen el posible ruido que llegue al centro sanitario.

En ese mismo espacio se llevará a cabo este año el Pirata Rock, festival musical que acoge la ciudad desde su nacimiento, en 2016, y que atrae a miles de jóvenes a la capital de la comarca de la Safor. Hasta ahora, el evento se celebraba en terrenos de titularidad privada cedidos, pero a partir de ahora lo hará en parcelas completamente públicas.

La idea de habilitar un espacio de conciertos en la ciudad parte de la celebración de este festival y la buena acogida que ha tenido entre los vecinos precisamente por las escasas molestias que genera la música. Pese a ello, desde el ayuntamiento aseguran que también podrá acoger otro tipo de actividades de gran formato.

El anuncio llega en medio del debate que existe entre la sociedad, divida a favor y en contra de este tipo de iniciativas musicales. Un claro ejemplo es lo que ocurrió en Tavernes de la Valldigna, donde un grupo de vecinos se organizó en una plataforma el verano pasado para protestar por la celebración de los festivales y la molestia que les provocaba. Su acción llegó a poner en jaque incluso la celebración del Mediterránea Festival con una denuncia ante el Seprona. Como respuesta nació otra plataforma, la de vecinos que están a favor de los festivales y que recibió el apoyo del alcalde, Jordi Juan, y su Gobierno local en pleno.

Diana Morant hizo el anuncio, durante la presentación del cartel del Pirata Rock ayer en Fitur, donde estuvo acompañada por los organizadores, Duke Abengózar y Javi Medina.

El festival se celebrará entre el 18 y el 20 de julio. Entre los principales grupos que actuarán se encuentran Lola Indigo, formación liderada por Mimi, concursante de la edición 2017 de Operación Triunfo y que actualmente participa en el programa Tu Cara me Suena de Antena 3, los valencianos de La Habitación Roja, referentes del indie a nivel nacional, el sevillano Beret, Macaco, Talco, Prozaksound o el dúo valenciano Pupul·les, entre muchos otros grupos.

La empresa afronta la tercera edición de este evento con una potente apuesta, ya que aumenta en 500.000 euros su inversión para llegar al millón de euros. Gracias a esa inyección, el Pirata Rock contará con tres escenarios, uno más que el año pasado, y con el doble de grupos, 42 respecto a los 27 del 2018. De ellos habrá cuatro internacionales, llegados de Italia, Rusia, Bosnia y Argentina.

Con todo, se estima un impacto de 2,5 millones de euros en la ciudad, así como la creación de 300 puestos de trabajo directos y 150 indirectos y se espera la asistencia de 51.000 personas, 20.000 más que la edición anterior y una cifra muy superior a los 8.000 de la primera.

Con esto, el Pirata Rock busca situarse como «el quinto festival más numeroso de la Comunitat Valenciana, por detrás del FIB, Arenal Sound, Medusa y Rototón, un reto al que le ayudará el Ayuntamiento de Gandia, consciente de todas las oportunidades que ello supone», indicó.

Por todo ello, en Gandia «volvemos a recibirles con los brazos abiertos, a tenderles la mano y a aportarles todas las facilidades para que puedan desarrollar sus actividades con éxito y con todas las garantías de seguridad y legalidad», dijo Diana Morant.