La posibilidad de reeditar Més Gandia, la fórmula electoral con la que los partidos de izquierdas se unieron hace cuatro años en la ciudad, logrando entrar en el Gobierno local con cinco ediles mediante un pacto con el PSPV, está cada vez más lejos.
Según ha podido saber este periódico, aunque no está rota, la negociación está congelada en estos momentos, ya que EUPV ha rechazado el número cinco en la lista que le ofrece Compromís. Esto supondría relegarles dos puestos, ya que hace cuatro años ocupó el tercero, por detrás de Lorena Milvaques (candidata a la alcaldía) y Laura Morant. La formación que lidera Nahuel González considerarque en estos cuatro años en el Ejecutivo de la ciudad se han fortalecido y, como mínimo, merecen lo mismo que en 2015, el tres y el seis, como apuntan fuentes del partido consultadas por Levante-EMV.
Compromís, en las primeras negociaciones ha mostrado su intención de colocar a su candidato, Josep Alandete, en el número uno, algo que parece indiscutible y que EUPV acepta, mientras que el dos sería para Alícia Izquierdo, el tres para Ferran Martínez Mendoza, una cara nueva en la política local, y el cuatro para Laura Morant, la actual concejala de Educación, dejado el cinco para González.
Desde EUPV, por su parte, consideran que esta propuesta es «una humillación» al partido y están convencidos de que responde a una voluntad de Compromís «de no pactar» por Més Gandia. Además, interpretan que este gesto busca que EUPV se levante de la mesa y quede como la que ha roto la negociación.
Pese a ello, desde el partido de izquierdas hacen hincapié en que las conversaciones no están rotas y que en los próximos días habrá nuevas reuniones en las que se espera poder llegar a un punto de consenso. Este periódico contactó con el coordinador local de EUPV, Nahuel González, que declinó pronunciarse.
Desde Compromís se basan en parámetros como los votos que logró EUPV en las últimas elecciones autonómicas para justificar su postura. Desde hace meses, desde algunos sectores de la formación, lanzan el mensaje de que disponen de entidad suficiente como para concurrir en solitario.
Esta situación en la negociación por Més Gandia se produce, de hecho, en un clima de fuerte división interna en Compromís, toda vez que existe un nutrido grupo de militantes que dice «sentir vergüenza» por que se pretenda relegar a Nahuel González, cuando «durante estos cuatro años ha sido fiel a la candidatura».
La coalición, de hecho, lleva algunas semanas enfrascada en un debate que incluye tres opciones: concurrir en solitario, volver a ir a las elecciones como Més Gandia o juntarse con todos los partidos de izquierdas, lo que incluye a Podemos, Els Verds, etc, aunque esta parece mucho menos viable por el encaje de miembros de cada partido en la lista.
Mientras tanto, como publicó ayer este periódico, un nutrido grupo de vecinos y militantes de diferentes partidos de Gandia ha promovido un manifiesto pidiendo la unidad de la izquierda en la ciudad.
Por lo que respecta a EUPV, en caso de que no se logre cerrar el pacto por Més Gandia, se buscará abrir diálogo con otras formaciones de izquierdas de la ciudad para intentar evitar que se escapen el mayor número de votos posibles. Si finalmente no hay ningún tipo de acuerdo, concurrirá en solitario.
