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Oliva exige pantallas acústicas junto a la AP-7 porque el ruido vulnera la ley

El ayuntamiento ya se dirigió al Ministerio de Fomento para que la empresa concesionaria situara los elementos, algo que no se hizo - La petición socialista fue respaldada por todos los partidos

Oliva exige pantallas acústicas junto a la AP-7 porque el ruido vulnera la ley

El pleno del Ayuntamiento de Oliva se sumó por unanimidad a la moción presentada por el Grupo Socialista Municipal por la que se insta al Ministerio de Fomento para que coloque pantallas acústicas en el tramo de la autopista AP-7 que discurre cerca de las urbanizaciones Tossal Gros, Bellavista y Sant Antoni. La petición se realiza para que esos elementos se pongan antes de que la autopista sea libre de peaje, el 1 de enero del año que viene.

El pleno corporativo, por unanimidad, acordó trasladar al Ministerio de Fomento y a la Demarcación de Carreteras del Estado en la Comunitat Valenciana una copia del acuerdo, junto a los documentos que justifican la parte expositiva de la moción y que son las alegaciones realizadas y enviadas en fecha 16 de marzo de 2015 por la entonces alcaldesa accidental Ana Morell, el estudio acústico realizado por la Comunidad de Vecinos de las urbanizaciones Tossal Gros, Bellavista y Sant Antoni que hizo la empresa Accustel.

Desde hace años los vecinos de las mencionadas urbanizaciones olivenses ubicadas junto a la AP-7 se quejan y vienen reclamando la colocación de pantallas acústicas en los laterales de la autopista junto a la zona de las viviendas. Consideran que los vecinos y vecinas de estos sectores vienen soportando niveles de contaminación acústica excesivos, que superan los límites establecidos legalmente, un hecho que quedó acreditado en el estudio realizado por la empresa Accustel en 2018, que demostraba que «en todas las medidas efectuadas se superaban en más de 10 decibelios los límites establecidos por la Ley de Protección contra la Contaminación Acústica.

El 26 de junio de 2009 el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino reconocía, mediante un escrito, «la contaminación acústica provocada por la AP-7 sobre esa zonas residenciales» y ya se proponía la colocación de pantallas acústicas. Pero en ningún momento esas pantallas han sido colocadas por la empresa concesionaria de la AP-7.

Dos alternativas

Ante esta situación, el Ministerio de Fomento tiene dos alternativas. O bien exigir a Abertis, la empresa concesionaria, que coloque las pantallas acústicas de forma inmediata, porque así viene establecido por la ley, o bien esperar a que caduque la concesión, el Estado recupere la gestión de la autopista y sea directamente la Administración la que responda a la petición de Oliva. Lo que se desconoce es quién haría frente al coste de esta operación en el caso de llevarse a cabo a partir del año que viene.

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