«Ha sido fácil». Con esta frase destacaban ayer Diana Morant, quien será investida mañana sábado como alcaldesa de Gandia de nuevo, y Josep Alandete, que ejercerá de vicealcalde, la buena sintonía que ha existido entre el PSOE y Compromís Més Gandia Unida en las negociaciones para formar el próximo gobierno de la ciudad. Ambos, con el resto de concejales y concejalas como testigos, plasmaron su rúbrica en el documento al que han llamado «Pacte del Serpis», que recoge todas las claves del acuerdo y las 80 propuestas programáticas que han pactado las dos formaciones.
El acuerdo incluye, por una parte, la configuración del nuevo Ejecutivo local, con el reparto de las delegaciones que le corresponde a cada formación, pero también el compromiso para que que Diana Morant sea investida con 15 votos, los de los 11 ediles y edilas del PSOE y los cuatro de Compromís +GU.
Será la primera vez que un gobierno de la capital de la comarca de la Safor cuente con una base de 15 concejales, formando uno de los ejecutivos más amplios de la historia. Las dos formaciones hicieron mucho hincapié en esta cuestión y también en el hecho de que el acuerdo se firmara a dos días de que se celebre el pleno de investidura. Con ello quisieron escenificar la buena sintonía existente entre ambas formaciones y también la continuidad a la estabilidad que ha imperado en estos últimos cuatro años. «Esta situación es histórica y demuestra que estamos avalados por parte de los ciudadanos. Tenemos un aval doble: Una nueva forma de gobernar, que prescinde de la lucha política, la crispación y el enfrentamiento, y por otra al trabajo realizado durante la legislatura». Alandete, por su parte, destacó la «pluralidad del gobierno», que, «unido, luchará por el bien común como objetivo».
Los dos partidos llegaron por separado a la firma. En primer lugar lo hicieron los representantes de Compromís Més Gandia Unida, con Josep Alandete a la cabeza. Tras unos minutos, aparecieron todos los concejales del PSOE con Diana Morant al frente. No faltaron los besos, abrazos, saludos y risas.
El lugar escogido para la firma fue el Mirador del Serpis, de ahí que, emulando al Botànic, se haya escogido la denominación de «Pacte del Serpis».
Tras estampar su firma, Morant y Alandete se fundieron en un abrazo, mientras el resto de miembros del nuevo ejecutivo aplaudía.
