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"A la gente, le pones una papelera que reclamaba y ya te felicita y te dice que eres hombre de palabra"

«Podré ser mejor alcalde porque en los años en la oposición he aprendido de los fallos de los otros y de los míos»

"A la gente, le pones una papelera que reclamaba y ya te felicita y te dice que eres hombre de palabra"

Su teléfono no para de sonar y apenas puede andar unos metros por la calle. Es como si los vecinos de Xeraco llevaran cinco años y medio esperándole. Tras una legislatura y media en la oposición, en las elecciones del pasado 26 de mayo el PP y Avelino Mascarell lograron una mayoría absoluta que le permitirán ejecutar un proyecto que, dice, se quedó a medias.

Dos años y medio como alcalde, una moción de censura, año y medio en la oposición, unas elecciones ganadas en las que no le permiten gobernar por el pacto de izquierdas, otros cuatro años de oposición y ahora mayoría absoluta. Lo suyo sí que es un manual de resistencia.

Tendré que leerme el de Pedro Sánchez, a ver (risas). Lo mío es escuela, y si hay que darle las gracias por algo a quien me hizo la moción de censura es porque me ha permitido tener escuela. Yo he aprendido de eso, he aprendido a ganar en muchos aspectos de mi vida. Cada fallo ha sido una lección y he sacado una lección. He aprendido para ganar con una mayoría absoluta, ahora que el partido ha perdido más alcaldías y concejales.

Esos años de estar en la oposición, ¿le harán ser mejor alcalde?

Creo que sí, porque he visto los fallos de los otros y los míos. Tengo un defecto y es que no tengo memoria, pero todo lo que he aprendido estos años me lo he guardado para no hacer esos fallos. Los errores que he cometido y el estar en la oposición cuando habíamos ganado, me ayudará a ser mejor alcalde.

Pero, ¿le ha dado una visión más global del municipio y sus necesidades?

Yo estoy en política desde el 2003. Hay cosas que yo he criticado estando en la oposición y ahora reconozco que ha sido un error. Muchas veces he criticado desde la ignorancia y esa es una de las cosas que he aprendido. Nosotros no hemos hecho una oposición destructiva. Por ejemplo, los presupuestos cuando eran más difíciles les hemos dejado trabajar. Hemos criticado gestiones o contrataciones que no nos gustaba como se hacían. El anterior gobierno ha hecho muchos fallos que nos han beneficiado para conseguir la mayoría absoluta. Hay que aprender de los errores.

¿En algún momento pensó en tirar la toalla?

En ningún momento, porque me sentía respaldado por mi gente. En 2015 saqué una mayoría muy alta y mejoramos los resultados de las elecciones anteriores y ellos bajaron en apoyos. Nunca me he sentido mal con mi gente o con quienes me han respaldado. Si la gente te vota no puedes pensar que no te quieren. La base del equipo es la misma de hace cuatro años, nos hemos reforzado y hemos hecho cantera. Nuestra lista era la más joven porque el PP debe ir renovándose y debemos tener cantera. Esa generación que ha entrado en el PP ahora serán los concejales en el futuro y son los que ilusionan.

En sus declaraciones tras ganar las elecciones dijo que ahora podía poner en marcha el proyecto que se quedó a medias. ¿Cúal es?

Un proyecto de hacer las cosas con ilusión y mirar primero por Xeraco. Es un proyecto ambicioso. El tripartito vendió la participación de los vecinos de una forma que no nos gustó. Para nosotros, la participación es implicar a la ciudadanía en las cosas que se hacen en el pueblo y eso no estaba pasando estos años. En los presupuestos participativos, por ejemplo, el tripartito enfrentaba a los vecinos. Unos pedían un parque infantil y las amas de casa pedían otra cosa y luego se votaba. Eso enfrentaba a la gente. Un presupuesto participativo se hace preguntando a la gente qué es lo que quiere y nosotros intentamos llevar a cabo todos los proyectos y los vas ejecutando mediante subvenciones o fondos propios. Pero no haces que la ciudadanía se enfrente por 20.000 euros que dan para una pequeña obra. Nosotros queremos recuperar el hecho de que el pueblo se sienta participativo de todo, no solo de una obra.

¿Se ha sentido respaldado por el partido?

Sí, no puedo decir lo contrario. Tengo buenos amigos, buenas relaciones y estoy agradecido al partido por haber confiado en mí.

¿A qué se deben los malos resultados del PP en general?

Creo que el partido debería fijarse en lo que hacemos en los pueblos donde ganamos las elecciones. El partido es bueno, los ideales son buenos, ¿qué ha pasado?, pues que a lo mejor no han sabido ejecutarlos o ha habido gente que nos ha hecho daño. Entonces, lo que hay que hacer es quitar a esa gente que se aprovecha de la política para sus ambiciones personales y coger a políticos vocacionales, que quieren hacer bien las cosas, que les gusta, les ilusiona. Si tu coges un partido quemado, que no ilusiona, logras esos resultados. Pienso que esta situación es temporal y la próxima legislatura sacaremos muchas más mayorías y recuperaremos el antiguo PP, que era la esencia del trabajo bien hecho.

¿Cómo le gustaría dejar Xeraco dentro de cuatro años?

Me gustaría dejarlo motivado, ilusionado, con la gente con ganas de hacer cosas, con facilidades por parte del ayuntamiento. Me gustaría que el pueblo recordara que hicimos pequeños proyectos que hacen grandes las ciudades.

¿Qué pequeños proyectos?

No es nada concerto. Ahora pones una papelera en una calle y los vecinos te paran para felicitarte y decirte: «eres un hombre de palabra». Si es que es algo que hacía falta, tú me la pides y yo te la pongo. Es cierto que hacía falta. Si me pides una burrada no la haré pero, ¿una papelera? El pueblo de Xeraco puede estar limpio con una buena organización y no está pasando. Mis compañeros, que son la esencia del equipo, ya están diciendo que eso lo tenemos que cambiar. En dos semanas es imposible pero lo haremos y Xeraco será un municipio limpio.

Va a ser usted el representante del PP por el partido judicial de Gandia en la Diputación de València. ¿Por qué se lanza a esa aventura?

Me han empujado. Mi objetivo, que era el ayuntamiento de Xeraco, lo conseguí, pero cuando te llama gente del partido y te dice que te toca porque el resultado que has sacado en tu municipio te avala, es así. Luego hice un par de consultas y me lo confirmaron. Después empecé a hablar con los compañeros de otros municipios y con Carolina Mengual, la alcaldesa del Ràfol de Salem, con quien llegué a un acuerdo. La intención es que el partido en la provincia de Valencia y también a nivel autonómico se parezca a Xeraco y trabajar como se ha trabajado aquí.

Cuando habla de compañeros de partido, ¿se refiere a personas de la comarcal, de la provincial o de la autonómica?

Concejales de otros pueblos, que cuando empezó a configurarse el tema de la diputación, me llamaron y me lo dijeron.

¿Era un premio a Avelino Mascarell o un castigo a Guillermo Barber para que que no repitiera?

No es un castigo en ningún caso. Guillermo ha hecho un gran trabajo y quien diga lo contrario está mintiendo. Lo que pasa es que apostaban por el cambio, o a lo mejor querían que fuera un pueblo el que representara al resto de pueblos.

Tenía dos rivales muy fuertes a los que ha superado, Óscar Gamazo, exdiputado nacional, y Guillermo Barber, concejal de Gandia y diputado hasta ahora.

Creo que se ha apostado por el municipalismo en la diputación contra el hecho de que la gran ciudad es la que deba estar. Debemos tener claro que Gandia es el hermano mayor y vamos a su casa a todo, pero hay que entender que los pueblos tenemos mucho que decir.

¿Cuál quiere que sea su papel en el organismo provincial?

Quiero trabajar por todos los municipios, tanto para aquellos en los que gobernemos como en los que estemos en la oposición. Voy a ser el enlace con la diputación, trabajar para que sus municipios tengan todos los beneficios que les pueda aportar la entidad y debo estar en compañía de mi gente para ayudar a que las próximas elecciones demostremos que somos un gran partido y lleguen donde ha llegado Xeraco.

¿Ha hablado con Guillermo Barber?

Sí, ayer mismo. Estuvimos reunidos los alcaldes que vamos a estar en la Mancomunitat de la Safor y él fue el organizador de la reunión.

¿Cómo es su relación con él?

Nosotros tenemos buena amistad de la política y eso no va a cambiar. Él me ha felicitado y yo le he agradecido su gesto.

Usted, junto a la alcaldesa del Ràfol de Salem, ha estrenado una nueva fórmula para partirse el puesto en la diputación. ¿Cómo surge la idea?

Cuando me empujaron a que me presentara yo consulté con varias personas y me dijeron que en la Vall d'Albaida también había una compañera interesada. Yo no soy ambicioso ni avaricioso, así que cuando me ofrecieron esa fórmula no me pareció mal, porque es una buena manera de conocer la diputación, formarme y conseguir cosas buenas para los municipios del partido judicial de Gandia y que la Vall d'Albaida también esté representada. Hace muchos años que esa comarca no ha tenido diputado y también lo reclamaban y no es mala opción.

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