El edificio principal del Ayuntamiento de Villalonga será accesible en cuestión de semanas gracias a la instalación de un ascensor que permitirá a personas con movilidad reducida o que precisen de elementos adicionales para desplazarse subir a la parte superior, algo que ahora es difícil, si no imposible.

Según ha informado el Gobierno local de esta localidad, después de los trámites administrativos correspondientes, finalmente se han iniciado las obras para la instalación de ese ascensor en el edificio.

«Esta era una actuación muy necesaria y deseada, que cuenta con un presupuesto cercano a los 130.000 euros y que nos permitirá avanzar hacia la construcción de un pueblo que tenga en cuenta a las personas con problemas de movilidad y por lo tanto más accesible», señala el Gobierno local en una nota.

Con esta actuación, que viene complementada con la construcción de rampas de acceso y la adecuación de los servicios para que también puedan ser usados por personas con discapacidad, el edificio consistorial se convertirá en unas semanas en un lugar accesible para las personas con algún tipo de discapacidad física o que tengan una movilidad reducida. «Con el ascensor y las rampas previstas, cualquier persona podrá acceder con total normalidad a las diversas plantas del edificio y en la totalidad de las dependencias municipales», añade la nota informativa.

Las obras se iniciaron el pasado martes y tienen una duración prevista de 4 meses. Durante el periodo de construcción los servicios administrativos del ayuntamiento se ubicarán en el edificio multiusos para poder facilitar las gestiones a los vecinos.

Estos trabajos han sido financiados en parte con una ayuda de la Generalitat Valenciana incluida en un plan plurianual que pretende hacer accesibles edificios públicos, especialmente de la Administración. En el caso de Villalonga la ayuda percibida, aprobada el pasado mes de mayo, fue de 80.153 euros, según figura en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana.