Los ayuntamientos de Tavernes de la Valldigna y Xeraco han presentado ante el juzgado sendos recursos contenciosos administrativos contra la resolución de la Conselleria de Territorio que traslada la titularidad del tramo de la carretera Nazaret-Oliva (CV-605) entre estos dos términos municipales de la Generalitat a los ayuntamientos. Por norma, las vías pecuarias, que es la condición que tiene el camino, debían ser de competencia autonómica. Sin embargo, el Consell, en una resolución de hace unos meses, traspasaba esa responsabilidad a los consistorios, que, por tanto, ahora son los encargados de su mantenimiento.
Este cambio entierra, al menos a corto plazo, la aspiración de los gobiernos de que se acabe la obra para convertir esa vía en una carretera en condiciones que une toda la costa desde València hasta Oliva. El tramo entre Xeraco y Tavernes es el único de todo el trazado donde aún no se han hecho las obras para habilitarla como la CV-605, denominación que sí que tiene el resto del vial desde Xeraco a Oliva. Especialmente durante el verano es un camino muy utilizado por los vehículos para desplazarse entre las playas. El trayecto cuenta con tramos muy estrechos donde resulta complicado el paso de dos vehículos.
En origen, una vía pecuaria no está considerada como carretera para el tránsito de vehículos, sino que está destinada al tránsito de animales. El concejal de Urbanismo, Josep Llàcer, se quejaba de que «los ayuntamientos no tenemos dinero ni recursos para hacernos cargo del mantenimiento de esa vía». Tavernes presentó el recurso hace aproximadamente un mes, en una decisión en la que «estuvimos a favor todos los partidos del ayuntamiento». Además, el consistorio vallero ha pedido la suspensión cautelar de la resolución de la conselleria porque «mientras se resuelve el contencioso administrativo nosotros no vamos a poder hacer frente al mantenimiento del vial».
Llàcer recordaba que «hace mucho tiempo que pedimos que la diputación asuma la gestión» y que «nosotros presentamos alegaciones al cambio de titularidad que no fueron aceptadas».
«Quieren cargarnos el muerto»
En ese mismo sentido, el alcalde de Xeraco, Avelino Mascarell, señalaba que «las cañas ya invaden parte del camino y lo hacen aún más estrecho, lo que dificulta el paso de vehículos y las cunetas están echas polvo».
El primer edil de Xeraco, que además es miembro de la corporación de la Diputación de Valencia, añadía, a su vez que «la intención del recurso es que la vía sea de titularidad provincial y que se lleve a cabo la obra que llevamos tanto tiempo esperando». Mascarell se queja de que «la Generalitat nos quiere cargar el muerto de la carretera a los ayuntamientos de Xeraco y Tavernes».
