El Consell de la Generalitat Valenciana va a obligar al Ayuntamiento de Gandia a levantar una barrera vegetal lo suficientemente alta y espesa como para que ejerza de separación y de amortización de impactos, visual y sonoro, entre el trinquet municipal, que se estaba construyendo junto a los campos de deportes de Roís de Corella, y el casco urbano residencial de Benirredrà, situado justo en el linde.
Así lo ha pedido el área de Paisaje de la Generalitat para seguir tramitando la modificación del Plan General de Ordenación Urbana de Gandia, que intenta «legalizar» la obra del trinquet, ahora paralizada por orden judicial a raíz de un recurso contencioso administrativo interpuesto por el Ayuntamiento de Benirredrà y una parte de los vecinos que residen en las inmediaciones.
Según explicó ayer el vicealcalde y responsable de Urbanismo de Gandia, Josep Alandete, para que la Generalitat autorice el cambio para que el suelo donde se ubica, que es párking, sea deportivo, Paisaje solicita barreras «de árboles altos» de separación hacia Benirredrà y hacia el resto del párking, situado ante el edificio de los juzgados. Además, esa zona debería incluirse en la red de infraestructura verde.
En cierta medida, lo que Paisaje está pidiendo es «ocultar» el trinquet para minimizar su impacto visual y las posibles molestias por ruido, si bien no parece que esta instalación vaya a generar sonidos muy por encima de lo que es normal en esta zona.
El trinquet de Gandia, una obra promovida e iniciada cuando el PP gobernaba la ciudad, es una enorme mole. Un edificio paralizado por orden judicial. Los tribunales, al menos de momento, avalan que Benirredrà tenía razón y en un suelo calificado para párking no podía construirse esa instalación.
El Ayuntamiento de Gandia tiene recurrida esa sentencia que declara «ilegal» el trinquet, pero, por si acaso algún día se ordena derribarlo, ya está cambiando el Plan General de Ordenación Urbana. Llegado el caso, alegaría al juez que ahora sí que se podría construir y, por lo tanto, intentar evitar la lamentable imagen de la demolición.
