Tavernes de la Valldigna, Gandia y Oliva, los tres municipios de la Safor que tienen playas catalogadas como «naturales» en el Plan de Acción Territorial de la Infraestructura Verde del Litoral (Pativel) seguirán sin poder autorizar en esos espacios actividades turísticas o recreativas que alteren el medio natural o a la flora y fauna que allí habita.
La comisión de Medio Ambiente de les Corts acaba de rechazar una propuesta planteada por el PP que pedía suspender el Pativel por considerar que es lesivo para propietarios de terrenos junto al mar y para ayuntamientos que quieren disponer de autonomía para sacar el máximo rendimiento económico a esas zonas tan turísticas en verano.
Los tres partidos que integran el Govern del Botànic, PSPV-PSOE, Compromís y Unides Podem, votaron en contra de la propuesta del PP y reiteraron su adhesión al Pativel y, en este caso concreto, a limitar los usos en las playas «naturales», una calificación que reciben los tramos de costa que están sin urbanizar. En Tavernes es la de Marenys, en Gandia la de l'Auir y en Oliva la mayoría de su litoral.
El verano pasado esta protección del Pativel a las playas naturales ya acarreó cierta polémica. Especialmente en Oliva, donde el ayuntamiento y el sector turístico quieren que se flexibilice la norma con el fin de autorizar actividades deportivas, como surf, o económicas, como chiringuitos. En Gandia, donde el consistorio sí aplaude el Pativel, el verano pasado ya se tuvo que suspender la instalación de la playa apta para perros en l'Auir, dado que la Generalitat considera que puede alterar el ecosistema allí establecido y el ayuntamiento rechazó de plano autorizar perros en las playas del Nord, Venècia o Rafalcaid.
PSOE, Compromís y Podemos señalaron que la protección del medio ambiente es un «bien común» de todos los valencianos y rechazaron la proposición defendida por la diputada del PP Elisa Díaz, quien aseguró que algunos ayuntamientos «ya sufrieron las primeras consecuencias graves sobre el turismo, motor económico principal de la Comunitat Valenciana» por culpa del Pativel. Por ello, el PP instaba al Consell a suspender «de manera inmediata la aplicación del Pativel en cuanto a los usos que regula en las playas catalogadas como naturales».
La diputada de Unides Podem, Beatriu Gascó, respondió que esta propuesta ya fue planteada y rechazada hace un año, y añadió que «llama mucho la atención la obsesión del PP de poner los intereses de los turistas por encima del patrimonio y del interés del pueblo valenciano». Según Gascó «ahora hay una administración que trata de defender la Comunitat Valenciana, su medio ambiente y su historia», y concluyó que existen playas urbanas a lo largo del todo el litoral en donde se pueden autorizar los usos deportivos y recreativos.
Graciela Ferrer, de Compromís, acusó al PP de «intentar confundir» y argumentó que « lo sostenible es ordenar los usos, compatibilizarlos y resolver los casos concretos».
Desde el PSPV-PSOE, la diputada Sandra Martín también criticó que el PP pretenda «volver a la situación anterior» y permitir actuaciones que antes se autorizaban porque no estaban reguladas. «Ustedes quieren manga ancha, como había antes, para autorizar todos los usos» en las playas naturales.
Por diferentes motivos, Cs y Vox también respaldaron la propuesta del PP, que no prosperó debido a la mayoría que suman los partidos del Pacte del Botànic.
