El Centro Internacional de Música Medieval (CIMM) ha iniciado su actividad con un curso y un concierto ofrecido por el prestigioso músico Eduardo Paniagua en el Monasterio de Santa María de la Valldigna, donde el CIMM tiene la sede.
El proyecto, pionero en España y dirigido por Mara Aranda, cuenta con la colaboración de la conselleria de Cultura y de la Mancomunidad de la Valldigna, y tiene como objetivos ser una referencia en la interpretación, estudio e investigación de las músicas medievales y de los códices manuscritos, así como la reconstrucción de instrumentos de la época.
Paniagua, junto con César Carazo y Wafir Sheik, abordó el programa Cantigas en la corte de Alfonso X el Sabio, del siglo XIII, explicando y comentando las obras que interpretaban, lo que supuso un estímulo para un público que llenó el aforo del monasterio y celebró la propuesta que brindó el músico madrileño. Entre ellos estaban los alcaldes de Simat y de Benifairó de la Valldigna, Víctor Mansanet y Josep Antoni Alberola, respectivamente.
Las Cantigas de Santa María de Alfonso X el Sabio (1221-1284), comprendidas en cuatro códices del siglo XIII, constituyen la obra lírica más importante de la España medieval. Escritas en galaico-portugués, incluyen 427 poemas con su correspondiente notación musical y adornados con extraordinarias miniaturas, y combinan relatos de milagros con loores a la Virgen María.
Paniagua, ganador del Premio de la Música Clásica 2009, de tres ediciones de los Premios de la Unión Fonográfica Independiente y en otras tres de los Premios de la Música Independiente, entre otros galardones, mostró su satisfacción y alegría con su participación en la sesión inaugural del CIMM, una iniciativa que, según señalan los responsables, considera «muy positiva y llena de audacia» que servirá para «abrir puertas y reflexiones» en torno a la reconstrucción de un gran patrimonio sonoro «que hay que preservar».
El especialista de música medieval, que ha cosechado con sus últimos trabajos excelentes críticas internacionales y el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional y el INAEM por su calidad y por la recuperación del patrimonio musical hispano-árabe medieval, considera que estos cursos específicos son complementarios para instrumentos que no se abordan en los conservatorios y sirven para aprender, de una manera teórica, práctica y participativa, cómo afrontan los intérpretes un repertorio complejo, las diversas decisiones y problemas que deben solucionar, así como para que aficionados o melómanos puedan «escuchar de manera distinta» un concierto.
Paniagua ha agradecido la invitación realizada por Mara Aranda y su energía, esfuerzo y pasión con este reto, y ha subrayado el «extraordinario ambiente» y la gran participación de músicos en el CIMM.